La gestora adopta una postura "más constructiva" con el mercado español en comparación con otros mercados desarrollados, manteniendo una posición neutral en lugar de infraponderar. Esto se debe al peso de ciertos sectores de nuestra bolsa, en los que tienen mayor confianza, como el sector bancario, industrial y de servicios públicos, especialmente en compañías que están migrando hacia modelos más sostenibles.
En lo que llevamos de año, el IBEX 35 lleva una subida de más de 1.100 puntos, lo que supone una rentabilidad de más del 13%.
Aunque BlackRock no ve un futuro claro para los mercados desarrollados en general, esto no implica que vaya a vender sus inversiones en la Bolsa europea o estadounidense, sino que reducirá su exposición en los próximos doce meses. Por ejemplo, en el caso de la Bolsa de Estados Unidos, han aumentado su exposición actual del 22% al 31%.
Vean que entre los ganadores del año del Ibex 35, el que menos ha subido ha sido casi un 12%, siendo Inditex el ganador con un 27% de rentabilidad.
Casualmente estos valores ganadores del ibex, son los que están en sectores que más le gustan a la gestora americana.
BlackRock también apuesta por sobreponderación en renta variable de las regiones emergentes, especialmente en China, donde creen que a pesar de que el impulso generado por la reapertura de la economía se ha debilitado, todavía hay margen de crecimiento.
Además de ser selectivos en cuanto a geografía, el gigante de los fondos de inversión apuesta por acciones de calidad con flujos de caja constantes, balances sólidos y capacidad de crecimiento, como Meta, Microsoft y Visa, a las que ven con potencial durante el próximo año, a pesar de las fuertes subidas registradas en los últimos meses. También se centran en lo que BlackRock denomina "megafuerzas", entre las que destaca la inteligencia artificial.
En cuanto al mercado de renta fija, BlackRock también apuesta por los bonos de los mercados emergentes. Consideran que la deuda emergente en moneda local es muy atractiva debido a la valoración y política monetaria, ofreciendo rendimientos del 7,5%. Por otro lado, solo se inclinan por bonos de corto plazo en Estados Unidos y mantienen una postura neutral en Europa en lo que respecta a bonos de mercados desarrollados.
En los últimos años, han surgido dudas sobre la clásica cartera 60/40 (60% en renta variable y 40% en renta fija). Ahora es BlackRock quien aconseja a los inversores revisarla, ya que consideran que ya no funcionará. Sugieren ser más creativos al construir la cartera, aumentando la inversión en mercados privados en lugar de apostar únicamente por acciones y bonos. La gestora muestra un optimismo particular en las inversiones en deuda privada, capital privado e infraestructuras.
BlackRock prevé que los inversores institucionales duplicarán sus inversiones en estos tipos de activos en los próximos años, pasando del 10% actual al 20% de las carteras. En el caso de los inversores con un patrimonio elevado, esperan que la asignación a esta categoría de activos aumente desde el 2% actual hasta el 10%.