El Banco de España, que ha tenido conocimiento de estas ofertas a través de consultas recibidas y de las declaraciones de transacciones exteriores, alerta de que estas prácticas "esconden, en la mayoría de los casos, fraudes y estafas".

El organismo supervisor indica que generalmente estas entidades están "supuestamente" domiciliadas en estados muy poco conocidos, a cuya información es difícil acceder, aunque señala que se ha comprobado en muchas ocasiones que estos bancos fantasma carecen incluso de permiso para operar en el lugar donde dicen tener su sede.

El fraude consiste en que para poder cobrar los préstamos, el cliente debe adelantar una cantidad en concepto de comisiones, gastos de envío, gestión y tramitación, o enviar fondos para abrir una cuenta en la entidad fantasma, en la que se le abonará el falso crédito. El préstamo nunca se materializa y las cantidades adelantadas nunca se recuperan.

El Banco de España advierte de estas prácticas y solicita que "siempre se desconfíe de operaciones en condiciones más favorables que las de mercado", propuestas por entidades desconocidas con sede en países remotos y por vías distintas a las prácticas bancarias habituales, y aconseja que nunca se hagan desembolsos previos.

Asimismo, recuerda que las normas sobre Transacciones Económicas con el Exterior obligan a las empresas o particulares residentes en España a declarar, con fines estadísticos y administrativos, la apertura de cuentas en el exterior y los préstamos recibidos de no residentes.

No obstante, el Banco de España destaca que la tramitación de estas declaraciones por parte del organismo supervisor no supone que éste valide o supervise las operaciones declaradas ni a las entidades que intervienen en ellas.