Según el diario latinoamericano, el grupo que preside Francisco González se ha impuesto a otras entidades financieras interesadas en adquirir este negocio, entre las que figuran el banco brasileño Itaú, con la segunda mejor oferta, el uruguayo Banco Comercial y el británico HSBC.

La baza del BBVA para quedarse con los negocios uruguayos de Crédit Agricole y convertirse en el segundo banco del país, por detrás de Santander, ha sido la semejanza estructural con la filial del banco francés, así como las mayores garantías ofrecidas sobre el mantenimiento de los puestos de trabajo de las actividades adquiridas.