Frente a los 137 millones de euros de beneficio que obtuvo el Santander-Totta en Portugal durante el mismo periodo del año pasado, el primer trimestre de este 2011 se ha saldado con un beneficio muy inferior.
 
En concreto el banco ha obtenido un beneficio de 90 millones de euros entre enero y marzo de este año en un marco en el que destaca los problemas de la deuda del país vecino, cosa que afecta de manera directa a los intereses de la entidad presidida por Emilio Botín.
 
En cuanto a la morosidad los datos hechos públicos por el banco destaca un valor que se sitúa en el 3% , lo que supone un ligero aumento frente al 2,9% registrado en diciembre de 2010.