Dijo que la situación macroeconómica del país es "complicada" y que se reajustarán las políticas monetarias a tiempo y en función de los cambios registrados en el panorama financiero nacional e internacional con el fin de promover un crecimiento rápido y estable de la economía china.

La economía china creció un 9,9 por ciento en los primeros nueves de 2008, si bien dicho crecimiento se fue desacelerando trimestre a trimestre: 10,6 por ciento en el primero, 10,4 por ciento en el segundo y 9 por ciento en el tercero.


En 2006 y 2007, nunca el crecimiento económico trimestral de China se situó por debajo del 10 por ciento.

A comienzos de noviembre, el Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó en ocho décimas su pronóstico de crecimiento de la economía china para el año 2009, que pasó del 9,3 por ciento al 8,5 por ciento.

Por su parte, Pekín trata de amortiguar dicha ralentización y anunció recientemente una partida de 586.000 millones de dólares (469.309 millones de euros) para impulsar la inversión y el consumo interno, y contrarrestar los efectos de la crisis financiera mundial.