Almirall acaba de poner sobre la mesa unos resultados muy castigados por tres factores fundamentales. El primero es el Covid-19, año negativo por estar alejado de vacunas y tratamientos de la enfermedad y por su efecto negativo en su principal negocio, el dermatológico afectado por los controles sanguíneos. El segundo por la entrada de genéricos al otro lado del Atlántico de su medicamento Aczone. Y existe además un tercero que se corresponde a la caída de los pagos en la venta de su negocio respiratorio a AstraZeneca en 2014.
Todo ello lleva a un beneficio neto de 74,3 millones de euros, frente a los 106 del pasado año, con una diferencia a la baja del 30%. Pero su Ebitda está por encima de lo esperado ,238,3 millones con una caída del 21,7%. Con ventas netas que bajan un 5,4% y una deuda neta al cierre del ejercicio que alcanza los 392,5 millones de euros, es decir 1.6v deuda neta/Ebitda.
Para 2021 sus expectativas pasan porque sus ventas netas crezcan un dígito medio frente al año anterior que fue de 755 millones y que su ebitda reportado se situará en un margen entre los 215 y los 235 millones de euros. Sobre el impacto de la pandemia en sus cuentas este año indican que se mantendrá en el primer semestre a la espera de una normalización progresiva en el segundo.
En su gráfica de cotización vemos como el valor se ve impactado en esta jornada por la caída aunque sigue subiendo casi un 7% acumulado en el ejercicio, con alzas de 3,30% en las últimas 20 sesiones y con ganancias en febrero del 3,5% para el valor y consolida la cota de los 11 euros por acción, muy importante para el valor.
Además la compañía ha anunciado un acuerdo con MC2 Therapeutics con respecto a la crema Wynzora en Europa para el tratamiento de la psoriasis en placas. El acuerdo es de licencia, colaboración y comercialización del fármaco. La compañía farmacéutica española venderá la crema y la danesa la fabricará y suministrará. MC2 Therapeutics recibirá un pago de 15 millones de euros más otros por concento de ventas y royalties de doble dígito en las ventas europeas.
“Almirall, nos indica el analista técnico de Estrategias de Inversión José Antonio González, desarrolla una recuperación en el muy corto plazo, a partir de su media móvil simple de 200 periodos o de largo plazo, que se encuentra respaldada por un repunte en la actividad de contratación”. De este modo, además de activarse señales de compra en osciladores, el precio nos deja una zona de soporte con la que trabajar, concretamente, el área proyectada en torno a los 10,64 / 10,44 euros, cuyo objetivo es el de atacar la zona de los 12,75 / 12,22 euros por acción”.
Almirall en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
Los indicadores técnicos premium de Estrategias de Inversión nos muestran que Almirall alcanza una puntuación total de 6,5 sobre 10, mejorada en un punto y en modo consolidación. Entre lo negativo destaca la tendencia a medio plazo que es bajista, el momento total rápido que es negativo y el rango de amplitud a largo plazo que se muestra creciente. En el otro lado, tenemos la tendencia a largo plazo que es alcista, el momento total lento que es positivo, el volumen en sus dos vertientes, a medio y largo plazo que es creciente y la volatilidad a medio plazo que se muestra decreciente.
La analista fundamental de Ei, María Mira destaca que Almirall “en una valoración por múltiplos y con un BPA estimado para el cierre de 2021 de 0,64/acción, los ratios se mueven en niveles aceptables frente a sus competidores. El PER en 17v y con crecimiento del BPA estimado del 32,8%, con lo que el ratio PEG muestra potencial en el valor por crecimiento de beneficios. Bajo también el EV/EBITDA, en 8,1v bajo estimación 2021”.
Y añade además la experta fundamental de Estrategias de Inversión que “el P/ventas se modera desde niveles históricos más elevados y se mueve en torno a 2,18v. En base a una valoración fundamental, revisamos recomendación a neutral para el valor a medio/largo plazo. Mantener si está en cartera”.