El portavoz del Ejecutivo alemán, Steffen Seibert, recalcó que "en la actualidad no es necesaria ninguna ampliación" del fondo de rescate, dotado con 750.000 millones de euros tras la crisis griega.

Por su parte, el ministro de Economía alemán, Rainer Bruederle, dijo que "el fondo en su estado actual es apropiado para la situación”.