Con ello, la economía alemana retorna a la senda del crecimiento después de que en el último trimestre de 2011 tuviera una contracción del 0,2%, la primera desde 2009.

En comparación con el primer trimestre de 2011, la economía alemana avanzó un 1,7%.


Los principales impulsos vinieron del comercio exterior. Sin embargo, la demanda interna también estuvo por encima de la del trimestre anterior.

Con ello, la economía alemana logró compensar una baja en las inversiones.