“Sin restar “responsabilidad” a la deficiente capacidad de comunicación que está mostrando Powell, que debería medir mejor sus palabras dado el impacto que estas tienen en los mercados, señalar que nosotros, de momento, no vemos que se den las condiciones para que el banco central estadounidense baje sus tasas de interés” indican los analistas de Link Securities.
Tras las declaraciones del presidente de la Fed, Jerome Powell del miércoles, la probabilidad de una bajada de tipos de interés por parte del banco central estadounidense ha disminuido hasta el 50%, desde el 67% en el que se encontraba el martes. Los mismos expertos destacan que “la economía del país se está mostrando sorprendentemente resistente y el mercado laboral parece seguir muy sólido”. En ese sentido, hoy se publican los datos sobre el comportamiento del mismo en el mes de abril, lo que servirá para constatar si sigue siendo así.
Y es que hoy, la atención de los mercados, a uno y otro lado del Atlántico, se centra en los datos de empleo estadounidense y en especial en la evolución de los salarios. El mercado laboral no está mostrando señales de que vaya a moderar el ritmo de creación de empleo, pese al bache de febrero, que en la lectura final queda en 56.000 ocupados. De este modo, la tasa de paro se colocó en abril en el 3,6% tras registrar 263.000 ocupados. La tasa de crecimiento anualizada fue del 3,2% en el primer trimestre. Lo previsible, según los analistas, es que en estas condiciones la creación de empleo progrese a un ritmo ligeramente por debajo a los 200.000 contratos de media mensual. La Fed, entre tanto, se escuda en la baja inflación para dejar los tipos de interés intactos. Están desde diciembre en una banda entre el 2,25 y el 2,5%. En el primer trimestre, se creó empleo a un ritmo próximo a los 180.000 ocupados mensuales de media. La productividad en ese periodo se aceleró un 3,6% mientras el paro se mantuvo en el 3,8%. Los sueldos crecen, a un 3,2% anual, pero no como para que cree riesgos o temores del lado de la inflación para la Fed. Powell asegura que no ve evidencias que indiquen que la economía se esté recalentando y de hecho "espera que la inflación repunte y que la economía se mantenga en buen estado sin requerir ayuda adicional por parte del banco central. Esta mejora en salarios en abril soportaría los argumentos de la Fed”, apuntan desde Bankinter.
Además, en Wall Street se darán a conocer los índices de gestores de compra del sector servicios, el ISM y el PMI, del mismo mes, datos a tener en cuenta, por su relevancia como indicadores adelantados de ciclo de EEUU. El mercado espera que la lectura del ISM se incremente hasta los 57 puntos, desde los 56,1 anteriores; mientras que la previsión es que los PMIs se mantengan estables, el de servicio en 52,9 y el compuesto en los 52,8 puntos.
Con los focos puestos en la agenda macroeconómica, en la sesión de hoy en Wall Street los resultados empresariales pasan a un segundo plano. Según los datos recogidos por Renta 4, en Estados Unidos ha presentado ya un 73% de las compañías del S&P500, habiendo batido estimaciones un 75% en beneficios, y un 57% en ingresos. Los beneficios han registrado un crecimiento medio del 1,8%, frente a la previsión del -2% previa al comienzo de la temporada.
En la apertura de Wall Street, el dólar mantiene las subidas registradas tras el discurso de Powell frente a la mayoría de divisas. El par del euro - dólar cede hasta las 1,1158 unidades.
Por el contrario, en el mercado de materias primas, los precios del petróleo mantienen la tendencia negativa después de que ayer se anotase una importante caída relacionada con el incremento de la producción de crudo estadounidense, la cual alcanzó la semana pasada los 12,3 millones de barriles por día, superando de esta forma en 2 millones de barriles por día la de hace un año. EEUU está, además, exportando ya 3 millones de barriles por día, algo que irá a más a medida que mejoren las infraestructuras internas de transporte. Así, el crude oil cede ligeramente en la apertura y cotiza en los 61,78 dólares.
Negociaciones entre EEUU y China
Según informa el medio chino South China Morning Post, China y EEUU se preparan para mantener la última ronda de negociaciones comerciales antes de firmar un acuerdo la próxima semana en Washington, aunque advierte de que el gigante asiático no se muestra tan optimista.
El viceprimer ministro chino, Liu, se dirigirá a Washington la próxima semana para una nueva ronda de conversaciones con el objetivo de poner fin a la guerra comercial que ha afectado a la economía mundial durante casi un año.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, ha sugerido que la reunión entre el presidente de Estados Unidos Donald Trump y el homólogo chino Xi Jinping está más cerca que nunca. Según la fuente citada por el diario, Xi Jinping podría visitar los Estados Unidos para firmar un acuerdo comercial en junio.
Los mensajes procedentes de la administración Trump de que las conversaciones de la próxima semana en Washington con China podrían ser la última ronda en los esfuerzos por terminar la guerra comercial de un año de duración han sido atenuados por los negociadores de Beijing, que han sugerido que la táctica para "generar presión" no debe tomarse "seriamente".