La Reserva Federal será la principal protagonista de esta semana en Wall Street. El miércoles, 18 de diciembre, el banco central más poderoso del mundo publicará su comunicado sobre política monetaria. Además, el presidente, Ben Bernanke, ofrecerá una de sus últimas ruedas de prensa al frente del organismo, ya que su mandato finaliza el próximo 31 de enero de 2014.

Las preguntas son muchas, y las certezas, pocas. De sobra es conocido que la Fed basa su política monetaria en la evolución del mercado laboral. Sus miembros han repetido en numerosas ocasiones que no recortarán la QE3 (programa de compra de activos valorado actualmente en 85.000 millones de dólares mensuales), hasta que se produzca una “mejora sostenible del mercado laboral”.

En base a este “mantra”, los analistas no se ponen de acuerdo en el significado de mejora sostenible. La economía de Estados Unidos creó 203.000 empleos en noviembre y la tasa de paro bajó hasta el 7% desde el 7,3%. En octubre, se crearon 200.000 empleos; y en septiembre 175.000. ¿Es esto suficiente para retirar los estímulos? ¿Preferirá Yellen esperar a tomar posesión de su cargo y comenzar a reducir la QE3 en marzo? ¿O querrá Bernanke despedirse con la sensación de que ha culminado su labor de los últimos años?

¿QUÉ PIENSA LA FED?

Pasamos a analizar ahora las declaraciones de los miembros de la Reserva Federal realizadas en los últimos días. Jeffrey Lacker, presidente de la Fed de Richmond, ha comentado que la Reserva Federal debe fijar un calendario detallado para dejar de comprar deuda.

El presidente de la Fed de Filadelfia, Charles Plosser, consideró “bastante positivos” los datos de empleo, y prevé una tasa de crecimiento del PIB del 3% en 2014. También comentó que “sería sabio comenzar a reducir la QE3”.

La compra de activos por parte de la Reserva Federal debe ser recortada “a la primera oportunidad”, ha dicho Richard Fisher, presidente de la Fed de Dallas y que el próximo año será un miembro con derecho a voto dentro del FOMC (Comité de Mercado de la Fed que decide sobre política monetaria). En su opinión, la Fed debería publicar “un calendario bien definido y articulado”, con el objetivo de reducir a cero la actual política de compra de activos (85.000 millones de dólares mensuales en bonos del Tesoro y activos MBS).

Fisher ha criticado el argumento de la baja inflación en Estados Unidos para seguir comprando activos. “Ya tenemos suficiente potencial de inflación a largo plazo, que sin duda pondrá a prueba nuestra capacidad para gestionar la política monetaria en el futuro. No deseo añadir más leña a esa hoguera”, ha concluido.

“Un pequeño recorte (del programa de compra de activos) reconocería la mejora del mercado laboral, al mismo tiempo que permitiría (a la Fed) seguir monitorizando la inflación durante la primera parte de 2014”. Son las palabras de James Bullard, presidente de la Reserva Federal de St. Louis y uno de los miembros de la Fed con derecho a voto dentro del FOMC, el Comité de Mercado que decide sobre la política monetaria del banco central.

PREVISIONES DE LOS ANALISTAS

Según una encuesta de Bloomberg a 35 economistas, 12 de ellos anticipan que la Fed comenzará a recortar la QE3 en diciembre, 9 apuestan por el mes de enero y los otros 14 prevén que sea en marzo. Según el último sondeo de Reuters, de los 60 economistas consultados, 32 de ellos prevén que la retirada de estímulos comience en marzo, 22 prevén que sea en enero y 12 economistas apuestan por esta semana. Como ven, bastante división entre los analistas, ejemplo de lo que ocurre dentro de la propia Fed.

WESTPAC BANK

Los expertos del banco australiano Westpac Bank señalan que su “visión es dirigida por la sensación de que los datos de empleo y la inflación simplemente no justifican que la Fed comience el tapering a corto plazo”. Así lo explica Rob Rennie, experto de divisas de la entidad.

“Si estamos equivocados y la Fed comienza a recortar sus compras de activos, creemos que serán parcialmente reemplazadas con otras formas de estímulos monetarios”, afirma este experto. “Para 2015, sí vemos a la economía de Estados Unidos acercarse a su ritmo óptimo de crecimiento. Entonces, comenzará el tapering”, concluye.

MOODY'S ANALITICS

Mark Zandi, economista jefe de Moody's Analytics, ha comentado que “la Fed esperará hasta marzo (para reducir sus estímulos) por varias razones. La primera, quieren estar seguros de que es una tendencia y no una mejora temporal en el crecimiento. Y la razón por la que la Fed estará nerviosa sobre esto es porque el PIB está subiendo alrededor del 2% en el cuarto trimestre”.

Este experto ha añadido, como segunda razón, “que la Fed querrá ver cómo evolucionan las disputas sobre el presupuesto en Washington, para asegurarse de que los políticos no perjudican a la economía. La inflación es muy baja, así que tienen espacio para esperar”.

CITIGROUP

“La mayoría de los analistas partimos de que la Fed iniciará el taper sólo cuando tenga muy claro que la recuperación económica es sostenible. Y no hace muchos meses el propio Bernanke aludía a un desempleo del 7% como premisa para comenzar a discutirlo. Como el alcanzado en noviembre.

Bill Gross (PIMCO), tras el dato de empleo, ha considerado que hay un 50% de probabilidad de que la limitación en la compra de deuda comience ya en diciembre. Y observando la reacción del mercado a los datos el viernes pasado, quizás tenga mucha razón. Esta puede ser la clave para la decisión final de la Fed: que el mercado valore la mejora económica y no tanto el hecho de que se aproxime el final de la política monetaria de cantidades.

Repito: nadie está hablando de anticipar futuras subidas de tipos. Aunque es claro que un crecimiento nominal previsto por encima del 4% para 2014 nos debería preparar para esa posibilidad más pronto que tarde. Pero la Fed será muy prudente al referirse a este tema, quizás matizándolo con nuevos objetivos en términos de desempleo más bajo, inflación más alta o incluso combinándolos en el crecimiento nominal”, reflexiona José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España.

LINK SECURITIES

“Si la Fed comienza a retirar estímulos, que estamos convencidos que, de hacerlo la semana que viene (esta semana), lo hará de forma muy limitada y con mucho cuidado, es porque el escenario económico al que se enfrenta el país está mejorando sustancialmente, algo que es muy positivo para la renta variable estadounidense y mundial. Bien es cierto que a corto plazo, este movimiento por parte del banco central estadounidense puede provocar algunas tensiones en los mercados, pero creemos que éstas serán moderadas. Es más, estamos convencidos de que, haga lo que haga la Fed la próxima (esta) semana, las bolsas lo van a celebrar con alzas. Si comienza el denominado tapering, porque elimina de esta forma toda la incertidumbre; y si mantiene sus actuales políticas monetarias sin cambios, porque todo sigue igual”, comentan desde Link Securities.

CAPITAL ECONOMICS

Por su parte, Capital Economics opina de manera diferente, y señala que los datos “dan a la Fed todas las evidencias que necesita para comenzar a retirar sus compras de activos en la próxima reunión del FOMC del 18 de diciembre. Durante los últimos cuatro meses, la media de creación de empleo ha sido de 200.000”.

Estos expertos añaden que “los números de noviembre han sido buenos en general, con todos los sectores mostrando una mejoría. La caída en la tasa de paro se ha debido a un rebote de 818.000 en la medida de empleo familiar, que ha más que contrarrestado la caída de 735.000 registrada el mes pasado por el cierre del Gobierno. La fuerza de trabajo también ha rebotado en 455.000, elevando la tasa de participación hasta el 63,0% desde el 62,8%”.

CONCLUSIÓN

Como ven, muchas ideas y múltiples interpretaciones. ¿Desatará la decisión de la Fed, sea cual sea, una oleada de compras; o de ventas? ¿Se producirá o no se producirá el tapering? ¿Qué dirá Bernanke sobre la recuperación? Las respuestas, este miércoles, 18 de diciembre.

César Pérez-Obanos