El Tesoro de España acaba de colocar un total de 5.910 millones de euros en deuda a largo plazo, frente al objetivo de entre 4.500 y 5.500 millones que se había marcado inicialmente.
En concreto, ha adjudicado 2.660 millones de euros en bonos a 2014, con un ratio de cobertura de 2,2 veces (3,62 veces previas) y a una rentabilidad media del 1,595% (desde el 2,182% anterior). Se trata de un mínimo histórico.
Asimismo, ha vendido 1.800 millones de euros en obligaciones a 2026, con un bid to cover (btc) de 1,41 veces (2,4 veces previas) y a una rentabilidad media del 3,977% (frente al 4,469% anterior).
Finalmente, ha captado 1.400 millones de euros en obligaciones a 2028, con un btc de 1,99 veces (2,7 veces previas) y una rentabilidad media del 4,199% (frente al 4,192% anterior).
“¿Demasiado papel?”, se pregunta José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España. Y continúa: “Ahora toca absorberlo. Será un buen test de las recientes caídas de tipos y del apetito del inversor internacional”.
S.C.