Desde unos días después a la última reunión del BCE (5 de junio) decíamos aquello de que si había algún momento para ponerse largo en el Euro/Dólar era justo cuando le teníamos cotizando en torno a los 1,3520-1,3530 siempre y cuando colocáramos un stop loss, en cierres, por debajo de los 1,35. Dábamos como objetivo de subida la zona de los 1,3670. Pues bien, ya le tenemos muy cerca de dicho nivel por lo que cualquier toque a dicha resistencia sería motivo suficiente para cerrar los largos y recoger las importantes plusvalías. Si luego se va más arriba, pues bien. Eso a nosotros nos debería dar igual. Una vez se alcanza nuestro objetivo y más cuando se trata de una resistencia importante se cierran los largos y a otra cosa.
JM.R.