La respuesta es muy sencilla. En este 2014 no afectará absolutamente nada en relación a la declaración que realizamos el año pasado. Es decir, los primeros 1.500 euros obtenidos a través de dividendos, están exentos de tributación fiscal.
¿Qué ocurre con las cantidades que exceden esos 1.500 euros? Por encima de esa cifra, se tributa en función al ahorro total como se puede visualizar en la siguiente tabla:
Modificación para tributación dividendos en 2015
Sin embargo, sobre cómo tributan los dividendos cambiará de cara a la campaña del 2015, dado que se deberán tributar en su totalidad. De esta forma, se elimina la distinción de los pagos recibidos por debajo de los 1.500 euros por los que un contribuyente que haya realizado alguna inversión en bolsa y que reciba dividendos inferiores a esa cifra, deberá tributar entre el 20% y el 24% a partir del ejercicio fiscal del 2015 y del 19% al 23% en el 2016:
Por lo tanto, de cero a 6.000 euros, la tributación será exactamente la misma según la nueva reforma fiscal aprobada por el gobierno. Por tanto, se elimina la exención a pagar esa cantidad con respecto a las plusvalías
Además, esta reforma fiscal afectaría al script dividend. Los inversores podrían pasar a preferir a cobrar los dividendos en acciones y no en metálico. Lo más recomendado sería cambiar los derechos por nuevos títulos, a nivel fiscal, puesto que así se diferencia el beneficio patrimonial hasta el instante en el que se vendan las acciones.
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