Tras este movimiento, creemos que la ecuación es óptima para apostar por subidas, si colocamos un stop loss
en dicha referencia (a confirmar su pérdida en precios de cierre). La siguiente zona de resistencia está situada en los 6,40 euros, y se corresponde con el máximo del pasado mes de abril. Por otro lado, esta semana, Iberdrola ha mantenido (en el juicio que le enfrenta a ACS), que el grupo constructor es un competidor directo, mientras que
ACS ha negado ese conflicto de competencia estructural y permanente.

Los argumentos de ambas partes han sido respaldados por sus respectivos peritos, cuya exposición ha protagonizado la primera jornada de la vista oral. El juicio es fruto de la demanda de impugnación que ACS presentó contra la última junta de accionistas de Iberdrola que le impidió entrar en el consejo de administración de la eléctrica pese a ser su primer accionista, con una participación actualmente del 20%.