Félix López, director general de Atlas Capital, considera que la medida de la Fed no ha sido suficiente. “Creo que el recorte de los tipos de interés es sólo un primer paso para normalizar la situación, de unos mercados que continúan nerviosos y con falta de liquidez y transparencia a la hora de fijar los precios”. Con este escenario como telón de fondo, el experto apuesta por un fondo para capear el temporal: el Julius Absolute Return Bond Fund que acumula una rentabilidad en lo que va de año del 4%, “gracias a una estrategia conservadora en renta fija, con cobertura en mercados hipotecarios americanos y con un perfil de riesgo bajo y una volatilidad del 2% en los últimos 12 meses. En cuanto a sus activos, tiene el 85% en la zona del G3 y más del 85% de la cartera está denominada en euros. Es un fondo –explica este experto- sin duda, atractivo”.Para un inversor algo más “arriesgado” la apuesta del director general de Atlas Capital pasa por
Mutua Fondo Gestión de Activos. Un producto que se gestiona mediante un método cuantitativo que valora la exposición a mercado de renta variable. “En un momento como el actual –comenta Félix López- donde los mercados pueden subir o bajar a corto plazo, el modelo ajusta la exposición a los mercados de renta variable. Es un producto que tiene una exposición del 50% a los mercados de renta variable, con mercados que tiene una tendencia alcista, como el asiático. Si el mercado recoge o apunta hacia arriba, el fondo incrementa su exposición al mercado de renta variable. A largo plazo ha obtenido rentabilidades muy buenas por encima del 40%. Nos parece una alternativa adecuada para aquellos partícipes arriesgados”, concluye este experto. Por zonas, el gestor de fondos de Atlas Capital aconseja evitar la exposición a los pequeños valores, “que han vivido unos años muy buenos” y en el corto plazo desestima el sector bancario hasta finales de año, ya que “creemos que aunque haya rebotes, la volatilidad va a ser extrema”, señala López. Por sectores, al director general de Atlas Capital le gustan especialmente el sector de las telecomunicaciones, tecnología y farmacia, “que pueden actuar como valores refugio y cuya valoración es muy atractiva.”