Iberdrola
se convierte en el valor menos favorecido de la sesión. Apenas sube un 0,17% hasta los 5,36 euros. Este movimiento es demasiado sutil para que el valor recupere la directriz alcista de medio plazo que parte de los mínimos de abril y que quebró la semana pasada. A corto plazo rebota en el soporte de los 5,30 euros y, si logra romper los 5,60, recuperaría la mencionada directriz. En cambio, de perforar los 5,30 euros caería hasta los 5 enteros, zona de importante soporte, ya que es un nivel psicológico (más difíciles de traspasar) y la zona por la que pasa la directriz alcista de largo plazo que nació en los mínimos de marzo del año pasado.
A pesar del tropiezo a corto plazo, la tendencia de Iberdrola es indiscutiblemente alcista y en el año gana un 18,5%.
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Por fundamentales, y a pesar de las palabras del presidente de la compañía, Ignacio Sánchez Galán, criticando el poco futuro que veía para las renovables en España, Iberdrola ha invertido 91,9 millones de euros en el área de redes de transmisión de energía eléctrica en nuestro país durante el primer semestre de 2014. Estas inversiones representan el 64% del presupuesto destinado por la compañía a España y tienen como objetivo seguir garantizando la calidad de suministro de la eléctrica.
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