Se han escrito millones de cometarios relativos a la relación entre las criptomonedas en general y Bitcoin en particular con el devenir de los mercados financieros. Si las bolsas suben se incrementa su precio y viceversa. Pero en esta última semana las lecturas pueden no haber confluido en gran manera. En especial en la parte final de la semana.
Y es que los inversores parten ahora de que, igual que a corto plazo los tipos de interés en Estados Unidos será muy elevados, con las abruptas y agresivas subidas para controlar la inflación por parte de la Reserva Federal, la moderación de los precios llevará a una flexibilización monetaria en 2023, con la caída de las mismos.
Así se vislumbra en el diafragma de puntos, las predicciones de la FED a medio y largo plazo sobre los niveles futuros de los tipos, que incluyen elevar por encima del 3,5% los tipos el año que viene y no bajar del 3% hasta después de 2024. Pero todo, claro, pendiente del dato de inflación estadounidense que conoceremos mañana mismo. De ahí que le hayamos visto con claridad cotizar por encima de los 21.000 dólares.
En su gráfica de cotización vemos que el valor recupera un 8,7% en la última semana, con recortes eso sí, que se mantienen en el mes, del 11,7% mientras que, en el semestre, los recortes alcanzan el 45,14% mientras que, en lo que, de año, la caída es del 54,27%.
Y las posibilidades, de avances y retrocesos están cruzadas tras estas últimas evoluciones sobre el valor. Desde el Blog The Changelly, vemos que las estimaciones para fin de año, en el caso de Bitcoin nos indican que, a cierre del ejercicio, no bajará de los 25.93 dólares, pero que la expectativa es que alcance el 31 de diciembre próximo, los 28.700 dólares por activo.
Más allá incluso va CoinpriceForecast, que coloca en los 31.511 dólares, con un incremento superior al 50% desde sus niveles actuales el precio del activo a finales de 2022. Ya para el próximo ejercicio, la expectativa, sin embargo, es negativa sobre sus estimaciones actuales para el cierre del presente ejercicio, porque espera que en 2023 caiga hasta los 30.440.
Uno de los expertos del mercado, Matthew Hyland se encuentra entre los más optimistas. Considera que todo esto acabará en algún momento con la caída de los mercados y del dólar, lo que beneficiaría a Bitcoin, aunque afirma que todavía no ha llegado el momento. Se felicita eso sí, de la mejora de Bitcoin en su cotización
Mientras en lo que, al índice del miedo y la codicia, se mantiene en miedo, pero mejorando hasta los 26, frente a los 20 de la pasada semana en los que llegó a alcanzar el miedo extremo y lejos del rango del pasado mes, en miedo, pero con 42. En lo que a capitalización se refiere, alcanza los 415.000 millones de dólares, en el puesto 15 de la clasificación mundial, entre el gigante taiwanés de los chips, TSNC y Exxon Mobil.
Entre los más pesimistas sobre el desempeño de Bitcoin en el mercado encontramos a JPMorgan, cuyo estratega global jefe de la firma destaca que, ahora mismo, la economía de Estados Unidos se debate con un pie en la recesión y otro en una cáscara de plátano.
Un escenario en el que no recomienda, ni invertir en valores tech de gran capitalización, las tradicionales FAANG ahora con nuevos acrónimos, ni invertir en criptomonedas, incluyendo, en este caso a Bitcoin. Y va más allá en sus recomendaciones que pasan por vender los criptoactivos que se tengan.
Destacamos además que, los últimos datos, nos indican que los ingresos por minería de Bitcoin empiezan a reducirse por debajo de la cota psicológica de los 1.000 millones de dólares en el pasado mes, ante la caída del interés de los inversores. Y es que, desde la caída de Terra esa ha sido la dirección constante en una espiral a la baja.
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