"El rápido deterioro de la actividad económica mundial ha sido alarmante. Hay poca experiencia a la hora de poder medir las repercusiones de un golpe crediticio tan agudo y sincronizado – dice Mike Zelouf, Director de Negocios Internacionales de Western Asset Management - . Para complicar aún más las cosas, tanto los estímulos monetarios como los fiscales se despliegan a un nivel sin precedentes. Como resultado: la incertidumbre es extraordinariamente alta".


"Lo que podemos decir con total seguridad, es que la economía mundial en este periodo no está sumida en un espiral descendente autogenerada. Esta sería la única condición que justificaría los actuales precios del mercado", añadió Zelouf.


El responsable de Negocios Internacionales de Western Asset considera que la actividad económica en Estados Unidos se recuperará en la segunda mitad de este año, cuando la política fiscal y monetaria haya tenido tiempo para influir en su comportamiento. "La recuperación probablemente será ligera, y la moderada inflación continuará en los niveles actuales, a medida que los hogares también participen en el largo proceso de corrección del balance. Estados Unidos se aproxima a una posición neutral en cuanto a duración, por lo que hemos optado por cambiar algunas posiciones en tipos de interés desde Estados Unidos a Europa, sobre todo en el extremo final de la curva ", señala.

En Europa, el Banco Central Europeo se ha mostrado reticente a reducir los tipos de forma drástica, y no cree que Europa se enfrente a amenazas deflacionistas. Trichet, Presidente del Banco Central Europeo, nunca ha descartado las bajadas de tipos como una opción, pero indicó claramente que no se trataba de una consideración seria.

Banco Central Europeo

"Creemos que la posición del Presidente del Banco Central Europeo puede subestimar la profundidad de la desaceleración económica. También creemos probable que el Banco Central Europeo deberá reducir los tipos más aún, y los mantenga a niveles bajos durante algún tiempo. Una bajada de tipos es una posibilidad real, y esperamos que los tipos a largo plazo sigan cayendo y añadan duración en la mitad de la curva ", dijo Zelouf.

En Japón, Western Asset ha desplazado recientemente la duración de sus posiciones en renta fija desde una posición corta moderada a una larga moderada. Basan esa actuación en el deterioro de fundamentales y en la necesidad de una respuesta monetaria más agresiva. Japón salió de una larga década de crisis en los años noventa como consecuencia de un mayor gasto público y un favorable comercio internacional. Sin embargo, el gasto del Gobierno no parece ser una solución viable como lo fue en el pasado. Dos son los factores que afectan: el endurecimiento del ratio deuda sobre PIB en el G-7, y la amenaza de una rebaja de su rating, una posibilidad real en el entorno actual. Además, el yen se ha fortalecido en más del 35%. Este aspecto equivale a una grave restricción monetaria que debe ser compensado a través de otros canales. El sector de la exportación se ve limitado una vez más en su capacidad para levantar la economía japonesa: por la combinación de la reducción del consumo en otras economías avanzadas y por un sector industrial cada vez más competitivo en los mercados emergentes. Western Asset ha añadido una mayor duración en el extremo final de la curva, ya que esperan un alza aplanada.

Western Asset está variando su posición desde valores respaldados por agencias hipotecarias, a bonos corporativas.

"Este debería ser un proceso muy gradual. Esperamos que nuestro largo sobrepeso hipotecario converja lentamente a una posición más neutral con el paso del tiempo. Aunque creemos que las hipotecas siguen ofreciendo valoraciones atractivas han ofrecido más rentabilidad que la deuda corporativa en los últimos seis meses ", dijo Zelouf.

Mike Zelouf apunta que Western Asset tiene como objetivo comprar nuevas emisiones en el mercado primario debido a sus precios atractivos. El mercado secundario aun no tiene liquidez, y los costes de transacción son mucho más altos que en el mercado primario, tanto en Europa como en los Estados Unidos, por lo que este reajuste durará un tiempo.

"Nosotros seríamos los primeros en admitir que los políticos han sido mucho más reactivos que proactivos. El shock y paquete de rescate de Geithner, Secretario del Tesoro de Estados Unidos, ha sido cualquier cosa menos proactivo. Sin embargo, incluso una frágil estabilidad en las condiciones económicas, sería muy positiva para los bonos corporativos, y ello podría conllevar que superara de forma importante el de la deuda pública ", concluyó.