Iberdrola está tratando de romper resistencias, como explica Néstor Borràs, analista de Estrategias de Inversión. Ya ha conseguido superar la directriz bajista de corto plazo, una resistencia importante, y ahora hay que vigilar que consiga romperla en cierre diario, "que sería muy positivo", apunta el analista.
Si rompiese esta resistencia formaría un pequeño doble suelo, con dos mínimos en la misma zona:
Pero la resistencia importante son los máximos anuales, en los 10,346 euros. Si consigue superarlo, el valor podría construir un doble suelo importante.
El pasado 7 de marzo, el valor trataba de perforar un soporte clave, en los 8,445 euros, que finalmente no era vulnerado. Desde ahí ha empezado un fuerte rebote.
También desde mínimos de marzo ha corregido niveles Fibonacci, con lo que si rompe la resistencia, podemos proyectar también un objetivo por Fibonacci en la zona de 11,022 euros.
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