javier mira facephi

Hoy, como nunca, todo se dirime en el viejo axioma de ‘evolucionar o morir’. Es lo que el sistema económico actual y el mundo de la biometría aplicada al mundo empresarial reclama con insistencia. O evolucionas, o innovas, o modernizas… o haces todo esto a la vez, o mueres.

El sector de la banca, el que más ha sufrido el cambio de los tiempos y el impacto en sus estructuras y formas tras la crisis financiera que se inició en 2008, entendió bien este concepto. Entendió que el nuevo contexto, exigía nuevas soluciones. Soluciones que rompieran con las concepciones anteriormente establecidas. Entendió que necesitábamos incorporar en los procesos y servicios financieros nuevas tecnologías para avanzar en la transformación digital del sector, en su innovación y en la atención a los usuarios.

Superar la crisis coincidió con los planes de las entidades financieras de generar una relación digital con el cliente y mejorar la experiencia con él, que motivó el ‘open banking’. Este banco abierto online requería de nuevos sistemas de seguridad y de autenticación. Fruto de ello, la tecnología de reconocimiento biométrico que desarrollamos en Facephi Biometría encontró un sector con un potencial de gran valor, hasta convertirnos en líderes en reconocimiento facial dentro del ámbito fintech.

La tecnología de FacePhi no se ha detenido solo en ahondar en los sistemas de reconocimiento facial, sino que hemos querido ir a más. También hemos trabajado en encontrar soluciones de reconocimiento periocular, de huella, de voz, firma electrónica y de onboarding digital. La banca ha entendido la utilidad de esta tecnología para lograr reforzar los sistemas de seguridad e identificación, agilizando y simplificando el acceso a sus servicios para ser más eficientes.

Para satisfacer la demanda de las empresas, hemos creado un producto integral, el inPhinite, que conjuga diversos sistemas de reconocimiento biométrico. Nuestro producto se divide en seis segmentos de soluciones especializadas en el ámbito de la seguridad que incluyen el componente Selphi, dedicado al reconocimiento facial; SelphID, un onboarding digital; Look&Phi, centrado en reconocimiento periocular; 4Phingers, diseñado para reconocer huellas sin contacto touchless; SignPhi para la autenticación de firmas electrónicas; y Phivox, de reconocimiento de voz.

 

El sector bancario ha reconocido el valor que va a desempeñar la biometría en el futuro, un futuro que ya ha llegado. Las entidades financieras han sabido detectar lo que para otros sectores había pasado desapercibido. La banca ha descubierto antes que nadie lo que hoy es una tendencia ya imparable, una tecnología que se abre paso con fuerza y determinación, y que cada vez estará más presente en nuestro día a día. Y así el sector bancario se ha convertido en la locomotora de la aplicación de los sistemas biométricos hacia otros sectores económicos, siendo los mayores impulsores de esta tecnología.

Las entidades financieras se han convertido en las encargadas de promocionar estas técnicas para ser incorporadas al conjunto de otros sectores empresariales como el de la seguridad privada, el acceso a transporte públicos, control de seguridad en edificios e instalaciones, comercios, motor, etc., incluso en la próxima relación del ciudadano con la Administración Pública. El abanico de posibilidades que se abre ante nosotros con el uso de esta tecnología disruptiva es extenso y variado, está plagado de nuevas oportunidades.

Ampliando mercados

FacePhi está preparada para este salto cualitativo y cuantitativo, para atender las necesidades que los mercados actuales demandan. Después de consolidar nuestra presencia en el mercado financiero con una cartera de clientes que en estos momentos supera las 30 entidades y que está fuertemente arraigada en Latinoamérica, ahora hemos fijado nuestro foco de atención en los países de Asia y la zona del Pacífico, regiones donde existe una fuerte y creciente demanda de servicios biométricos.

En este sentido, Corea del Sur ha sido el escenario elegido para establecer nuestra primera división internacional, denominada FacePhi APAC. Desde nuestras oficinas ubicadas en el Work&All de Pangyo, un espacio situado en uno de los centros de negocio más importantes de la capital coreana, hemos comenzado a operar en la zona con esta nueva división con el convencimiento de que en el corto-medio plazo obtendremos nuestro primer contrato en la zona.

Nuestra oficina en Corea del Sur será fundamental en extender nuestros sistemas biométricos en diversos sectores productivos asiáticos y de países del pacífico, donde el uso de la biometría está en permanente auge. Somos conscientes de la apuesta que ha hecho China, y el resto de las potencias económicas del sureste asiático, en materia de desarrollo de biometría e inteligencia artificial en todas sus vertientes.

De esta forma, ampliamos nuestra estrategia de expansión sin renunciar a ser actores de primer orden dentro del mercado biométrico en otros ámbitos. Prueba de ello, es una de las últimas operaciones comerciales que hemos emprendido y que nos ha llevado a dar el salto al sector sanitario. Con el acuerdo alcanzado con Swiss Medical Group de Argentina hemos accedido al mercado sanitario, por primera vez, extendiendo nuestra tecnología y diversificando nuestra actividad empresarial hacia otros sectores.

Nos movemos en un mercado intrínsecamente dinámico, multisectorial, donde la necesidad de sistemas biométricos va a ser creciente, donde FacePhi no va a perder el paso de la locomotora que impulsa la extensión de la tecnología al conjunto de las fuerzas productivas. Una locomotora a la que nos hemos subido con unos productos eficientes y que se dirige hacia un futuro de éxito, sin visos a que nada ni nadie le pare, porque el progreso no puede ser obstaculizado. Conocemos el potencial que esconde la biometría en sus usos, somos conscientes del valor, del grado de implantación que va a adquirir esta tecnología en el tiempo que viene y, por supuesto, lo vamos a aprovechar.