Esta semana vamos a tener que estar muy pendientes de las conclusiones de la reunión del comité federal del mercado abierto

Los tipos de interés se van a mantener. No creo que vaya a haber un incremento por ahora. Si bien el crecimiento que vimos la semana pasada fue robusto hay mucha presión de parte del Ejecutivo. Todavía vemos una paciencia desde la FED.

Esta semana vamos a conocer el dato de desempleo que podría mantenerse en el 3,8%

Sí. Es una tasa bastante baja que no se da desde 1969. Eso tiene un impacto en el sector de consumo que es una pieza angular de la economía americana. Sin embargo hay que ver si los salarios están subiendo. Eso ha sido siempre el reto número uno de la política económica fiscal de los EEUU. Los salarios no han subido al ritmo que se ha querido y, aunque si ha habido un cierto incremento, no ha sido el que se espera.

También estaremos muy pendientes del PMI manufacturero del mes de abril y la confianza del consumidor. También datos de vivienda.

Creo que hemos visto una evolución de los mercados mixta. Si bien para las tasas de crecimiento publicado se podría esperar un alza de los mercados, pero el tema económico global no está como en los EEUU y eso puede ser un indicador; fuertes valoraciones en empresas que han sufrido correcciones… pero sí. Un signo mixto no es una historia ni trágica ni exitosa.

También influyó a los mercados el dato del PIB que se quedó en el 3,2%, muy por encima de las expectativas del  consenso del mercado…

 Creo que se traduce en que está reforzado en el sector del consumo. Vemos un consumidor no muy preocupado por lo que pueda venir y aleja los rumores de recesión. A la vez puede retroalimentar el ciclo de que la economía sigue estando bien y el consumidor. Yo sin embargo si veo que hay unos retos globales y respecto al comercio que no podemos ignorar. Sin embargo, pareciera que en el momento en la que la salud del consumidor estadounidense sigue estando en buen estado.   Y eso que han sido los tres meses del cierre del Gobierno y un duro invierno, y sin embargo ha conseguido mantenerse y superar las expectativas. Eso dice mucho.

Seguimos conociendo las cifras empresas y, quizá, las que más han llamado la atención del mercado han sido las tecnológicas…

Amazon parece que está recortando costes de manera eficiente y su servicio en la nube sigue siendo muy rentable.

Netflix ha invertido mucho en el tema de contenido aunque cada vez más tiene competencia. Yo creo que se mantiene siendo un líder en suscripción pagada de televisión.

Twitter es una empresa clave en el mundo de la comunicación y política, pero no ha sabido como capitalizar y ahora ha venido cambiando.

Facebook, si bien ha tenido tantos vaivenes con la justicia, al final del día cuando uno ve el número de usuarios 1.1500 millones de usuarios a través de sus propiedades (Facebook, Instagram y WhatsUpp).  Eso es mucho y es algo que el mercado responde positivamente, independientemente de si vienen algunas multas por lo que pasó con Cambridge Analytica, creo que todavía el inversor tiene mucha confianza en Facebook porque sus números son muy altos y cuenta con mucha lealtad de sus usuarios.

 

Peor le ha ido a Tesla que ha tenido pérdidas de 702 millones de dólares ¿Qué está pasando?

A mí me ha sorprendido siguiendo a su fundador. Han tenido problemas con la distribución y que estamos viendo el despertar de competidores con una línea de producción más engrasada y mejorada, y se han dado cuenta que pueden hacer una oferta igual de atractiva, que si bien no es novedosa y mediática como Tesla,  sigue siendo una oferta valiosa para el consumidor que está buscando un vehículo que sea más pro ambiental.

También presentaron resultados dos de las petroleras más importantes, Chevron y Exxon Mobil. No les fue también como se esperaba en un momento en el que los precios del crudo están en máximos de seis meses.

Veo a estas empresas ligadas al crudo y hay muchas reservas en EEUU. El mercado ya ha venido asumiendo la caída de producción de Venezuela que ha sido gradual y ha venido asumiendo los riesgos geopolíticos con Irán y el fin de las excepciones con países que hacían negocios con Irán. Es algo que el mercado ha venido asumiendo desde hace un tiempo y por eso no hemos visto un repunte de los precios del petróleo.

Así también, algo que ha afectado es que no hemos visto un crecimiento global a la par del americano, por lo que no veo el petróleo repuntando de una manera muy abrupta en los próximos meses.

¿Cómo está la situación en Venezuela y cómo está afectando a los países limítrifes?

Es crítica. No solamente por la caída en producción que ya venía de hace años. También vimos las sanciones del 2019, lo que ha tenido un efecto en la caída de las exportaciones petroleras y también, lo que ha tenido un efecto que no esperamos ha sido los nuevos apagones, la falta de electricidad con la que no se puede producir petróleo.

Esto ha desencadenado un colapso económico anormal en un país que no está en una situación de guerra y ha generado una crisis migratoria sin precedentes. La ONU estima que hay 3.5 millones de emigrantes venezolanos en la región y pronostica que la cifra de emigrantes venezolanos en Colombia va a llegar a 2 millones. Eso tiene un impacto no solo en lo fiscal sino también en el mercado laboral de estos países, que están tratando de bajar la tasa de desempleo y que suban los salarios. Es muy difícil con un extra de 2 millones de personas lograr eso.

Así que es un impacto desestabilizador para las economías regionales por la crisis migratoria venezolana.

Y ¿cómo puede terminar?

Es difícil. Según  la ONU hay 7 millones de personas en situación de ayuda humanitaria, y hace falta mucho tiempo para lograr una salida electoral a todo esto. La situación puede empeorar todavía antes de mejorar.