“Enero nos trajo un arranque de año desbocado, contagiado por la fuerte marejada con la que despedimos el 2017. A pesar de que todas las alarmas sobre las valoraciones hacía tiempo que habían saltado por los aires, la realidad se empeñaba en mostrarnos que no existía freno que pusiera fin a dicha tendencia. Escenarios así, suelen ser los más difíciles en los que estar ya que, al no funcionar patrón alguno, se maximiza el riesgo de equivocación”, afirman los expertos de Carax en un informe a sus clientes.

Tanto es así, que las caídas de las dos primeras semanas de febrero acabaron prácticamente con las subidas de enero.   Y no hay nadie que pueda descartar que esto pueda volver a ocurrir y eso es, dicen estos expertos, lo que está provocando que  muchos analistas sigan esperando un entorno de más calma para volver a entrar. Para esos ahorradores han preparado una estrategia “en la que buscamos dar con la selección de compañías que sea capaz de ofrecernos compañías europeas que estén atractivas por valoración y, a su vez, coticen con bajos niveles de volatilidad”.

Volatilidad EEUU y Europa

Volatilidad

 

Para ello han seleccionado a todas las compañías del Stoxx600 con una recomendación de compra, que tengan una menor beta en los últimos seis meses y aquellas que hayan tenido una menor volatilidad en las últimas 260 sesiones.  Para entrar en esta lista, además, les exigen que tengan un potencial de, al menos, un 15%.

Estas son las empresas seleccionadas y entre ellas no hay ninguna española:

 

fundamentales

 

Al hacer las comprobaciones, los analistas de Carax explican que en los últimos tres años esta estrategia habría batido al índice en prácticamente todo el periodo. Eso le habría permitido tener una rentabilidad del 30,39%  frente al 6,88% del selectivo europeo.