Pese a que el FMI había avisado en las últimas fechas que podría presentar una recomendación a la Corte Suprema de los Estados Unidos, finalmente su postura ha sido la de no intervenir. "La directora general del FMI (Christine Lagarde) ha retirado su recomendación de que la Junta Ejecutiva del FMI envíe un amicus curiae en el caso de Argentina, siguiendo la decisión de las autoridades de Estados Unidos de no apoyar la presentación en esta etapa", informó el organismo a través de un comunicado.
La postura final del organismo que dirige Christine Lagarde es de no dar un paso al frente, pese a que el sábado en la conferencia del G20 en Moscú los mensajes enviados eran contrariamente distintos.
La justificación de este cambio de actitud en su postura viene motivada porque Estados Unidos modificó el apoyo que había realizado al principio frente a la iniciativa de Lagarde. Aún así, el FMI se mantiene al tanto de lo que pueda suceder en las futuras fechas. "El Fondo permanece profundamente preocupado sobre las amplias consecuencias sistémicas que la sentencia del tribunal de primera instancia pueda tener para el proceso de reestructuración de deuda en general", explicaron.
Lagarde ha convocado hoy a una "restricted informal sesión”, en muchos directores “manifestaron que el FMI debe mantener un principio de neutralidad con los países y no pronunciarse a favor o en contra, pese a que en este caso un fallo en contra de la Argentina tiene consecuencias sistémicas", según indicaron fuentes muy cercanas a las deliberaciones a tenor de lo que publica el Diario Clarín.

