El candidato del PP a la Presidencia de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha prometido un paquete de deducciones fiscales por valor de hasta 2.000 millones de euros para la próxima legislatura que permitirán, a su juicio, "generar actividad económica y empleo y aumentar recaudación sin subir impuestos".

Fernández Mañueco se ha comprometido a bajar al nueve por ciento el tipo mínimo del tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a todos los contribuyentes, que actualmente se sitúa en el 9,5 por ciento, además de mantener todas las deducciones que ya había y que sumaban 40 millones anuales.

También ha apostado por facilitar la adquisición de vivienda para favorecer emancipación jóvenes y por mantener una bonificación del 15 por ciento bonificación en el IRPF para quien quiera comprar o rehabilitar una vivienda de cara a ponerla en alquiler.

Tras criticar el 'bono joven' del Gobierno de España por ser una "medida trampa" con "mil cabos sueltos", que "no cuenta con presupuesto", que se ha aprobado "sin diálogo" con las comunidades autónomas que lo tienen que ejecutar y que "dejará fuera a muchos jóvenes".

Asimismo, se ha referido a las medidas para favorecer la gratuidad en el transporte a lo largo y ancho de Castilla y León y a su propuesta de deducción de 1.000 euros en el IRPF para quienes vivan en zonas despobladas.

Alfonso Fernández Mañueco ha sido el encargado de cerrar un encuentro electoral celebrado este lunes en el Parador de Segovia en el que han participado los consejeros de Hacienda de Madrid, Galicia y Castilla y León, todos ellos del PP.

Fernández Mañueco ha destacado los datos de empleo conseguidos en Castilla y León, con cifras "mejores que la media de España", y ha defendido la política "moderada" del PP, de bajada de impuestos, frente al "hachazo a los bolsillos de los españoles" que plantea el PSOE, al tiempo que ha criticado que los socialistas castellanoleoneses achaquen ahora la "infrafinanciación" de la Comunidad a la política fiscal de la Junta y no al modelo de financiación autonómica, como "sí hacían" cuando el PP ocupaba el Palacio de la Moncloa.

"INFLUIR CON EL CIS"

El candidato 'popular' ha pedido el apoyo de la ciudadanía para continuar al frente de la Junta otra legislatura y evitar que la Comunidad "sea gobernada desde Ferraz", sede del PSOE, el cual "intenta influir en las elecciones mediante las encuestas del CIS", aunque le ha advertido, tras el sondeo publicado este lunes, que "las urnas no se llenan con encuestas sino con votos".

En el acto de Segovia, que ha estado moderado y presentado por el cabeza de lista 'popular' a las Cortes por la provincia, Francisco Vázquez, los consejeros de Hacienda han subrayado la creación de empleo y de riqueza asociada a bajadas fiscales frente a los "mantras" de la izquierda de subidas impositivas que conllevan "menos empleo" y, además, "peores servicios públicos".

Así lo ha defendido el consejero de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, quien ha compartido foro con el conselleiro de Hacienda y Administración Pública de la Xunta de Galicia, Miguel Corgos, y del consejero de Economía, Hacienda y Empleo de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty.

En este acto, celebrado en este undécimo día de campaña electoral antes de los comicios del día 13, Fernández Carriedo ha subrayado que las autonomías gobernadas por el PP son "firmes defensoras de la libertad" y, a pesar de los "mantras de la izquierda", sus bajadas de impuestos son "compatibles" con "los mejores servicios públicos" de toda España.

Así, ha recordado que la supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones ha permitido que las donaciones se hayan multiplicado "por 13" en Castilla y León, lo que repercutirá, a pesar de la eliminación de este tributo, en un incremento de la recaudación "del 5,8 por ciento", gracias al dinamismo económico generado.

En este sentido, Fernández Carriedo ha insistido en que "más impuestos no supone siempre mayor recaudación" y ha abogado por contar con "cada vez más gente pagando impuestos", pero "pagando menos impuestos".

Frente a esto, ha criticado la intención del PSOE de "subir diez impuestos" la próxima legislatura si llegara al Gobierno de la Junta, lo que convertiría a Castilla y León en la comunidad con los tributos "más altos de España".

El consejero castellanoleonés ha defendido la política fiscal del PP en la Comunidad, pensada en "ayudar a las familias, al mundo rural con una fiscalidad diferenciada, al emprendimiento y creación de empleo y a la inversión en patrimonio histórico y medio ambiente".

"LA ECONOMÍA NECESITA ESTABILIDAD"

Su homólogo gallego, por su parte, ha coincidido en que bajar impuestos es "invertir en crecimiento económico" y ha reclamado el apoyo para el PP en las elecciones del 13 de febrero, a fin de garantizar la "estabilidad", la cual resulta "fundamental para el crecimiento económico"

Frente a esto, Miguel Corgos ha rechazado la querencia de la izquierda por "la deuda pública" en sus políticas fiscales y sociales y ha advertido de que esos niveles "insostenibles" de deuda "ahogan el crecimiento" y de que "la deuda de hoy son los impuestos de mañana".

Al hilo de esto, el consejero madrileño ha insistido en el aumento de la recaudación que conlleva las reducciones impositivas y ha recordado que ese modelo fiscal del PP nació precisamente en Castilla y León de la mano de José María Aznar y su paso por la Junta.

Fernández-Lasquetty ha defendido que el protagonismo le debe corresponder a la sociedad y que esa política del PP se basa en el principio de la "libertad" para que los ciudadanos decidan en qué emplear su dinero, frente a la "arrogancia planificadora" de los socialistas que "siempre saben lo que tiene que hacer la gente".

El consejero de la Comunidad de Madrid ha subrayado que "los impuestos bajos funcionan" y ha defendido la supresión de impuestos como el de sucesiones, al hilo de lo cual ha asegurado que en regiones como Asturias "un 30 por ciento de la gente no puede recibir la herencia de sus padres por lo que le cuesta en impuestos".

Fernández-Lasquetty ha criticado la "obsesión socialista" por subir impuestos y ha advertido de que tras el concepto de "armonización fiscal" que reclama el Gobierno de España se esconde un intento por "dar un hachazo a los ciudadanos de las comunidades del PP" que disfrutan de tributos más bajos, por lo que ha recalcado la importancia de "defender la autonomía fiscal y financiera" de las comunidades autónomas.