El banco de inversión australiano Macquarie registró unos beneficios netos atribuidos de 4.706 millones de dólares australianos (3.160 millones de euros) en el conjunto de su año fiscal, finalizado en marzo, lo que supone un incremento del 56,1% en comparación con el ejercicio anterior, según ha informado este viernes la entidad financiera.

"Aunque muchas de las regiones y mercados en los que opera Macquarie observaron elevados niveles de volatilidad este año, nuestra estrategia de atajar áreas clave de necesidades no satisfechas en la comunidad no ha cambiado", ha subrayado la directora gerente y consejera delegada de la firma, Shemara Wikramanayake.

La facturación en el conjunto del año fue de 17.324 millones de dólares (11.627 millones de euros), un 35,6% más. De esa cifra, los procedentes de comisiones y tasas crecieron un 33%, hasta 6.887 millones de dólares (4.622 millones de euros), mientras que los originados por operativa bursátil fueron de 3.996 millones (2.682 millones de euros), un 14,8% más.

De su lado, los ingresos por intereses netos experimentaron un incremento del 30,3%, hasta 2.860 millones (1.920 millones de euros), mientras que el resto de ingresos operativos avanzó hasta 3.448 millones (2.314 millones de euros), un 74% más.

Los gastos de personal en el conjunto del ejercicio fiscal experimentaron un crecimiento del 21,9%, hasta 6.725 millones (4.513 millones de euros), al tiempo que los gastos de comisiones, tasas y corretaje fueron de 1.029 millones (690 millones de euros), un 17% más. El resto de costes operativos fue de 2.105 millones (1.412 millones de euros), un 24,6% más.