El acuerdo busca asegurar la utilización de plasma para la producción de inmunoglobulinas "destinadas a cubrir las necesidades de los miles de pacientes del país", ha informado Grifols en un comunicado este miércoles
El acuerdo forma parte de la estrategia de crecimiento global a largo plazo de Grifols y complementa el trabajo que está realizando Canadian Blood Services para aumentar sus niveles de autosuficiencia de inmunoglobulinas.
De este modo, trabajarán conjuntamente para incrementar de forma gradual la obtención del plasma canadiense necesario para suministrar 2,4 millones de gramos de inmunoglobulinas anuales en 2026.
Las nuevas instalaciones productivas se ubican en Montreal y está previsto que empiecen a funcionar en 2024 y que la fábrica esté totalmente operativa en el 2026.
El consejero delegado de Grifols Raimon Grifols Roura ha defendido que "una lección clave que nos ha enseñado la pandemia es que necesitamos contar con unas infraestructuras sanitarias nacionales lo más sólidas posibles".
Por su parte, el ceo de Canadian Blood Services, Graham D. Sher, ha apuntado que el acuerdo es necesario para mejorar la autosuficiencia de Canadá, proteger su sistema nacional de sangre y "garantizar el suministro doméstico de inmunoglobulinas a los pacientes" del país.
