La realidad es que el consumo pesa algo más de dos tercios en el PIB y sigue lastrado. “El medio de los inversores hace que no se consuma y , si esto sigue así, veremos al sector consumo afectado”. Estamos viendo una desaceleración del crecimiento. Así que hay menores expectativas de crecimiento y las compañías con el Capex respecto a amortizaciones en mínimos de diez años “lo que supone que las compañías tienen caja pero no la invierten, con lo que todo se queda estancado”, explica a Radio intereconomia.

Preguntado por si estamos ante el fin de los estímulos monetarios, García reconoce que en Europa quedan como mínimo dos años. “El problema no es cuando el Banco Central deje de comprar sino cuando deje de seguir incrementando las compras. Los  bonos están a precios históricos y en el momento en que el mercado atisbe que el mensaje no es ultraexpansivo, habrá una venta de bonos que supondrá una catástrofe de repercusiones muy complicada”.

En la operación de venta de Gas natural por parte de Repsol y Caixabank reconoce que los que ganan son los vendedores que reducen deuda y, en el caso de la entidad, sigue pendiente de la OPA de BPI.  Pero también se abre una puerta para la gasista. Es positiva para  todos.