La tasa de morosidad de los créditos concedidos por entidades bancarias, cajas y cooperativas tanto a particulares como a empresas, ha registrado un descenso hasta el 10,67%. Este porcentaje supone un retroceso con respecto al mes anterior, que fue del 10,95%, y hace que se acerque a niveles de marzo de 2013, donde se encontraba en el 10,4%. Todo esto, en relación a los datos provisionales del BDE.
Este informe de la morosidad incluiría el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que han dejado de ser considerados dentro de la categoría de entidades de crédito.
De esta forma, la cifra total de créditos dudosos se ha visto disminuida hasta los 142,8 millones de euros, 3.019 millones de euros menos que el mes anterior. Sin embargo, el crédito global del sector se incrementó en 6.922 millones, hasta ascender a los 1,339 billones de euros. Por tanto, la morosidad de la banca se ha reducido en 2,94 puntos porcentuales respecto al máximo histórico marcado en diciembre de 2013, cuando se ubicó sobre el 13,6%.
Pero el cambio metodológico también ha provocado que se hayan visto estas variaciones. Sin incluirlo, la tasa de mora se encontraría en el 10,86%, una cifra inferior al 11,16% que se registró en el mes anterior. En este sentido, el saldo de crédito se elevaría hasta los 1,313 billones.
Pero estos datos no han provocado que las entidades bancarias hayan cambiado sus provisiones, sino todo lo contrario. Las mantienen. Todo ello, pese a que las han reducido levemente en relación al pasado mes, hasta llegar a los 86.580 millones de euros. En agosto, se situó en 88.301 millones de euros.