Lea también: Siga toda la actualidad de las negociaciones en GreciaEn una entrevista con El Mundo, recuerda como él fue quien dio un paso al frente y encerró a los líderes para conseguir un pacto y reitera lo que ya ha dicho en otros medios: “Hacia las 07.00 de la mañana pensé que 'Grexit' era lo más probable, posible”.En ese momento se da el punto crítico de las negociaciones, explica Tusk, una diferencia de 2.500 millones de euros del fondo virtual de privatizaciones: "Para mí eso era el final. Había fatiga, cansancio, irritación. Ambos eran sinceros, pensaban que habían ido demasiado lejos”. Por fortuna, la amenaza del presidente del Consejo Europeo de que declararía al público que el acuerdo no se había logrado por esa pequeña diferencia, les hizo entrar en razón.Alemania no es la ganadora en términos de poder político. Al final del día, Alemania tuvo que sacrificar mucho más que otros paísesAnte el rotativo defiende su postura de asegurar que no es una cuestión de ganadores o perdedores: “Estoy seguro al 100% de que Alemania no es la ganadora en términos de poder político. Al final del día, Alemania tuvo que sacrificar mucho más que otros países a la hora de los números, del dinero, que era el tema principal del proceso”. "No hay ganadores ni perdedores". "Nadie quería un 'Grexit' entre los líderes”, explica.Lea también: Así están los ánimos en Europa: el acuerdo en Grecia es un parche para unos mientras para otros sólo pospone el 'Grexit'EL GREXITSin embargo, sí confiesa que la salida de Grecia del euro sí es una opción en la que el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, cree firmemente y lo califica de “intelectualmente legítimo”.“Mi intuición me dice que Schäuble es lo que cree de verdad. Ha mandado el mensaje muy claramente, abiertamente”, explica Tusk. En cuanto a Merkel, aclara que “estoy totalmente seguro de que para Merkel la postura de su ministro era una herramienta útil de negociación, pero no era su objetivo político”.Pero acaba mostrándose convencido de que el proceso puede acabar bien, pero no excluye la posibilidad de que haya más rondas en verano. “No se puede descartar, pero espero que no sea necesario”, confiesa.Advierte Tusk del peligro en Europa de la alianza táctica entre la derecha radical y la izquierda radical y las esperanzas revolucionarias¿HUMILLAR A ATENAS?También a la cabecera de Unidad Editorial expresa su profundo desagrado por la corriente europea que acusa a los líderes de humillar a Grecia y a Alexis Tsipras. "No puedo aceptar este argumento de que alguien ha castigado especialmente a Tsipras o a Grecia. Todo el proceso ha sido para proporcionar asistencia a Grecia”, explica. “¿Por qué algunos políticos, intelectuales o periodistas dicen, en Grecia y en Bruselas, París o hasta Berlín, dicen que ha habido humillación y que Tsipras es el perdedor. Es absurdo”, enfatiza.De hecho señala que el acuerdo alcanzado es el resultado de lo que negoció el primer ministro heleno y para Tusk, “lo hizo con éxito y con condiciones suaves no sólo financieras sino políticas”.Insiste el presidente del Consejo Europeo que la posición de Alemania tras las negociaciones, “quizá no sea más débil, pero desde luego no es más fuerte". Y en lo que se refiere a Europa, advierte del peligro de la "alianza táctica entre la derecha radical y la izquierda radical" y las esperanzas revolucionarias.Lee además:Varoufakis saca los colores a la 'troika': publica su verdad sobre el documento firmado por Europa y AtenasVídeo | Merkel hace llorar a una niña palestina: 'Aquí no pueden entrar todos'