Las empresas han dado un salto cuántico en el uso de las tecnologías del siglo XXI, se han dado cuenta de que hay un montón de cosas que se pueden hacer sin moverse uno de su ordenador. El mundo online está cogiendo una preponderancia que no va a soltar, eso es clave en el siglo en el que vivimos, la gente está aprendiendo con otras herramientas y las empresas están empezando a funcionar de forma eficaz porque no les queda más remedio. 

Esto también va a generar nuevos modelos de negocio que van a ir surgiendo, con empresas de sectores que van a desaparecer, nuevos sectores que van a emerger. Las empresas van a trabajar más en redes, alrededor de las empresas grandes porque las grandes compañías van a reducir personal y van a tener más gente trabajando desde fuera para ellas. Las pymes van a ser pymes con tecnología como las grandes empresas y va a cambiar el concepto de pyme tradicional española, que disponía de ordenadores de hace diez años a pesar de que el propietario tenía el último modelo de Apple o el último móvil inteligente que hubiera salido en el mercado.

La banca también está teniendo un tiempo de mucha prueba, están intentando cuidar a sus clientes. Los asesores están haciendo una labor más personalizada con los clientes, están trabajando en la buena dirección pero van a tener que fusionarse un montón de bancos para competir en un mundo que está a punto del Apocalipsis en lo que se refiere a la deuda.

La deuda pública asciende ya a trillones, no les va a quedar más remedio que imprimir más dinero pero lo van a tener que hacer con mucho cuidado. Los bancos centrales van a ser clave en este escenario, porque están surgiendo muchas criptomonedas que las puede lanzar cualquiera, ya hemos visto como han parado a Libra de Facebook pero después del coronavirus no creo que logren frenar otra iniciativa así y además surgirán mucho imitadores.

¿Si una empresa es más creíble frente al mercado que los propios gobiernos, por qué no van a poder generar una moneda más creíble frente al mercado que la de los propios Estados? Las criptomonedas empiezan a tener cierta garantía a través del uso que se hace de ellas y creo que muchas grandes empresas van a juntarse en consorcios para el desarollo de criptodivisas. 

Por último os quería hablar de la educación. Las habilidades del ejecutivo del siglo XXI son diferentes a las del siglo XX, tenemos que hacer mucho y aprender constatemente. En una de las empresas en la que participo BrainLang ha creado un concepto como es el visual listening, que es aprender escuchando y viendo cualquier cosa. En estos momentos se ha especializado en la práctica del inglés, pero se puede aplicar a la práctica de cualquier conocimiento humano. Este y otros inventos van hacer que la forma de aprender sea constante, relevante porque vamos a tener que ir actualizándonos de manera constante.