Esta sociedad era un pozo constante de pérdidas debido al deterioro del valor del activo. NAU nació con un capital aportado principalmente por terrenos y activos de Bancaja, que alcanzaba los 502 millones de euros. Incluso cuando pasaron a la nueva sociedad se revalorizaron, aunque fuese época de crisis, pero cuando se dio lugar a la fusión que produjo el nacimiento de Bankia
, sumado a los continuos rescates y reestructuraciones, el valor de los inmuebles cayó en picado.
Es tal el germen que ha fomentado esta caída que hace dos meses NAU tuvo que reducir el capital de la empresa en 377 millones de euros para poder paliar las pérdidas y evitar la desaparición de la misma.
En cuatro años, desde el 2011 hasta el 2014, la empresa tenía unos números rojos que superaban los 300 millones de euros. Fue en el año 2014 cuando Bankia empezó a buscar un comprador de su posesión de NAU. Al fin, ayer, confirmaron que lo han encontrado, aunque no se ha desvelado quién es el interesado ni cuánto pretende abonar.
Según Expansión, Gesfesa, el otro accionista principal, que cuenta con cerca del 36% de los títulos de la empresa, “el que se haga con los títulos de Bankia, con el apoyo de la firma de inversión Atitlán, liderada por Roberto Centeno y Aritza Rodero”. El grupo comunicó que la operación todavía no ha finalizado, aunque están muy interesados en respaldar la operación “financieramente”.