MADRID, 04 NOV. (Bolsamania.com/BMS) .- Los expertos de Credit Suisse cuentan hoy que hace unos días realizaron un viaje por las principales capitales del sur de Europa, esto es, Atenas, Lisboa, Roma y Madrid, y que ahora tienen más confianza en que la recuperación se está materializando. No es ninguna novedad que las exportaciones se han convertido en un gran contribuyente para el ajuste de estas economías, pero el bróker suizo también cree que las importaciones están mejorando ante el fin del deterioro en las demandas internas de estos países. Pero estos expertos se suman también al “queda trabajo por hacer”, aunque con una postura sobre España menos dura que en el pasado: “El ajuste fiscal este año ha sido más suave que en 2012. El año que viene será más desafiante para Portugal, y relativamente más suave para España e Italia”.
Lástima que no todas las voces sean tan optimistas. Aunque el viernes la agencia de calificación Fitch le retiraba a España su amenaza al mejorar la perspectiva sobre el rating de su deuda hasta estable desde negativa, la prensa británica ha vuelto a arremeter contra España. The Telegraph aseguraba el sábado que el sur de Europa está al borde de un precipicio, un abismo provocado por la fortaleza del euro. “Cuidado con lo que deseas, porque puede cumplirse”, advierten en el rotativo británico, que rememora cómo los padres de la moneda única soñaron con crear una divisa capaz de competir contra la hegemonía del dólar. Ahora que existe, podrían darse cuenta de que es una “maldición”.
Explica el diario que mientras la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos y el Banco de Inglaterra (BoE) deprecian su moneda con la impresión de dinero, y el Banco Popular de China también lo hace con el yuan deliberadamente para captar exportaciones, el euro se ha revalorizado un 9% frente al dólar entre junio y octubre, y un 28% en lo que llevamos de año frente al yen japonés. “Podríamos decir que China está exportando un exceso de capacidad manufacturera a Europa, en pocas palabras, está exportando desempleo (…) El tipo de cambio del euro es demasiado elevado para dos tercios de los países del área común, una razón clave que explica que el desempleo haya marcado máximos de todos los tiempos en el 12,2% en septiembre. Esto está presionando a esos países a una crisis de deflación similar a la de los años 30, haciendo casi imposible que Italia, España y Portugal salgan del agujero de deuda”.
Así se quejaba de esta situación el ministro de Industria de Francia, Arnaud Montebourg: “Cada 10% que sube el euro le cuesta a Francia 15.000 empleos. Reino Unido, Estados Unidos y Japón han puesto en marcha estímulos monetarios, pero la Unión Europea (UE) no tiene nada más que una moneda fuerte. La divisa no pertenece a los banqueros ni a Alemania, es de todos los miembros de la Zona Euro”.
Según un informe de Deutsche Bank del que se hace eco The Telegraph apuntaba a que “el umbral del dolor” para Alemania está en un euro a 1,79 dólares, pero en el caso de Francia está en 1,24 y para Italia en 1,17. Ahora mismo se mueve en los 1,3511. “Alemania está en buena situación y domina la maquinaria política, mientras que Italia grita de dolor”, avisa de forma muy gráfica el diario.
Para el diario británico, la brecha norte-sur en Europa tiene muchas causas. “Alemania vende máquinas y coches de lujo con un amplio margen de beneficios. El 'Club Med' (el sur) compite en la parte baja con China. Además, Alemania ha rebajado sus salarios en los últimos años para ganar un 25% de competitividad frente al resto de miembros del área. Es una vieja historia, pero las consecuencias son tóxicas, tanto que François Heisbourg, líder del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos en Francia, pide que el euro 'se duerma' con el objetivo de salvar el proyecto europeo”, apunta el rotativo, que transcribe sus palabras: “Debemos encarar la realidad de que la UE se ve amenaza por su propia moneda”.
Esta misma semana, el Banco Central Europeo (BCE) se pronuncia sobre los tipos de interés. Importantes expertos como los de UBS, Bank of America Merrill Lynch o JP Morgan vaticinan un recorte del precio del dinero porque la inflación lo permite al estar muy lejos del objetivo del 2% de la autoridad monetaria europea. No obstante, el consenso sigue esperando que los tipos en Europa se mantengan en el 0,5%. De momento, las bolsas esperan a Mario Draghi con buen tono. Han arrancado la semana en Europa con subidas del 0,30%. El Ibex 35 partirá mañana desde los 9.873,80 puntos tras anotarse hoy un 0,36%.
María Gómez