La rentabilidad de los bonos americanos a 10 años (Treasuries), se ha situado en máximos de diez años después de que se haya conocido que algunos asesores chinos han recomendando reducir la compra de títulos estadounidenses, según publicaba la agencia Bloomberg. Y eso podría ser un problema, porque el gigante asiático es el mayor tenedor de bonos de ese país con una cartera valorada en 1,19 billones de dólares en octubre del año pasado. Una noticia que logra que llueva sobre mojado después de que el Banco de Japón anunciara justo un día antes que reducirá la compra de bonos estatales de ese país.
Que la subida de la rentabilidad de los bonos iba a poner fin al mercado alcista es un augurio conocido. El propio Bill Gross, el gestor de Janus Henderson, una vez conocido como el gurú de la renta fija del mundo –y fundador de Pimco-, se apresuraba a decir el martes que el mercado de bonos ha entrado en una fase bajista. La renta fija lleva alredor de 30 años en un claro mercado alcista que algunos piensan que, quizá, pueda pronto cambiar de estado.
Reuters
“No estoy segura de que no estemos dirigiendo a un largo mercado bajista”, ha asegurado Allan von Mehren analista jefe del banco danés Danske a Bloomberg. En su opinión, “si la rentabilidad sube demasiado se pondrá fin al momento y reducirá el ritmo de subida de tipos de la FED y la subida de la bolsa”. En su opinión, la rentabilidad del bono americano a 10 años puede alcanzar el 2,8% en los próximos tres a seis meses, “pero no mucho más”, asegura.
El estratega de Deutsche Bank, Jim Reid, aseguraba que “estamos en un punto de inflexión a nivel técnico para los bonos gubernamentales y, quizá si se da la vuelta, se pueda provocar la corrección más fácil que cuando estábamos en el pico del QE”. Los treasuries suben por quinto día consecutivo.
El movimiento de los bonos soberanos en todo el mundo es lo que ha provocado la toma de beneficios en las principales bolsas del mundo. Pero podría generar un movimiento inverso. El inveror Bill Miller ha explicado en una entrevista con la CNBC que “que si la rentabilidad de los treasuries rompe por encima del 2,6% puede producirse una subida en la bolsa similar a la de 2013. Cuando la gente empezó a perder dinero con la renta fija, decidieron sacarlo de ese mercado y dedicarlo a la bolsa”, ha dicho.