Los datos que se han conocido hoy en el ámbito macro americano han dejado un sabor más bien tibio en EEUU. Por un lado La venta de viviendas nuevas en EE UU cayó un 0,7% en julio, en línea con las previsiones mientras que el mercado esperaba un descenso del 0,6%.

Por otro lado el índice manufacturero Richmond bajó más de lo previsto al situarse en -10 en agosto. Los expertos adelantaron un descenso desde -1 hasta -5.