Así lo aseguró hoy en rueda de prensa su consejero delegado, Alfredo Sáenz, quien precisó que otros 5.000 millones de euros los conseguirá con la emisión de acciones convertibles.La financiación de la operación también incluye la venta de la participación en el italiano San Paolo-Intesa, así como de numerosos activos inmobiliarios, que el banco ya tenía pensado enajenar para sacar el máximo beneficio posible antes de que se empiece a aplicar la nueva regulación de riesgos, Basilea II.El resto de fondos hasta los 19.900 millones de euros provendrán de titulizaciones y de liberación de capital, explicó Sáenz, quien aseguró que el banco quiere vender su participación en Cepsa (ingresaría por ella más de 5.000 millones de euros) pero que no se ha considerado al hacer estos cálculos porque quizá no les dé tiempo antes de que se ejecute la compra, prevista para el último trimestre del año."Cepsa está en la lista de activos a la venta y es nuestra intención venderlo, pero por razones de tiempo no la hemos considerado" para financiar la compra de ABN, dijo Sáenz, quien apostilló, no obstante, que "puede que lleguemos a tiempo pero puede que no".Sáenz negó que el grupo se haya planteado desprenderse de parte del capital de Banesto para conseguir fondos y aseguró que "no tenemos intención" con los números planteados hasta el momento.En la rueda de prensa, los máximos ejecutivos de Royal Bank of Scotland y de Fortis, Fred Goodwin y Jean Paul Votron, respectivamente, se mostraron dispuestos a mantener negociaciones con ABN y con Bank of America y reconocieron que han tenido conversaciones amistosas con la entidad estadounidense, pero que éstas no llegaron a buen fin porque "había una laguna entre las dos partes".Aseguraron que les gustaría que la dirección de ABN recomendara su oferta a los accionistas, pero admitieron que sería todo un "desafío" ya que el acuerdo que tiene con Barclays y Bank of America les impide aconsejar otras operaciones.