En concreto, Moody's recortó el pasado 13 de junio la calificación de la deuda española, desde 'A3' a 'Baa3', con perspectiva negativa, dejándola a un paso del bono basura. La agencia justificó esta decisión en el rescate europeo a la banca española, en el "muy limitado" acceso a la financiación y en la débil situación económica del país.

Ahora, Moody's está evaluando el impacto de esta decisión sobre los bancos españoles "dada la magnitud de la rebaja de la calificación a España y la creciente incertidumbre en torno a la valoración de los activos inmobiliarios de los bancos".