Por su parte, el fabricante estadounidense General Motors afirmó hoy en un comunicado que ha solicitado un préstamo al Gobierno tailandés, cuya cuantía no indicó, para construir una planta de motores de gasóleo en la provincia de Rayong, en el centro del país.

La filial tailandesa de General Motors cerró su fábrica de vehículos en Tailandia en enero por el descenso de la demanda.


El competidor nipón Toyota Motor también ha anunciado que reducirá este año en un 62,3 por ciento, hasta los 200.000 unidades, la fabricación de vehículos en su fábrica tailandesa.

En la actual coyuntura económica y según el Instituto Tailandés de la Automoción, la producción del sector bajará un 15 por ciento en 2009, aunque podría bajar hasta el 45 por ciento y ocasionar la pérdida de 45.000 puestos de trabajo si la crisis empeora.

La industria del motor en Tailandia, que emplea a 300.000 personas, sacó al mercado 1,4 millones de vehículos en 2008.