
Manuel Manrique, presidente de Sacyr, ha recogido este jueves el Premio Tiepolo 2025 de las manos de Amparo López Senovilla, secretaria de Estado de Comercio de España, en una ceremonia celebrada en la Embajada de Italia en Madrid.
Este premio, que otorgan la Cámara de Comercio e Industria Italiana para España (CCIS) y la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), reconoce el papel de Manrique en el refuerzo de las relaciones económicas y empresariales entre España e Italia.
El Premio Tiepolo pone en valor la trayectoria de Manuel Manrique al frente de Sacyr, desde donde ha impulsado la construcción y modernización de infraestructuras estratégicas en Italia de la mano de su socio local Fininc.
En sus palabras de agradecimiento, el presidente de Sacyr destacó el papel de la familia Dogliani, propietarios de Fininc, en el éxito de la compañía en el país. “La familia Dogliani ha demostrado una capacidad extraordinaria para trabajar en equipo, superar retos y mantener siempre la mirada puesta en la excelencia. Sin su compromiso y su confianza, este camino no habría sido posible”, destacó.
“Nuestra alianza no es solo de pasado y de presente, también es de futuro. Juntos hemos demostrado que podemos ser competitivos y también ser útiles para los ciudadanos en Italia. Queremos profundizar en esta alianza que seguro traerá cosas aún mejores en el futuro para ambas partes”, añadió el presidente.
Más de 500 kilómetros de autopistas
Desde que Manuel Manrique asumió la presidencia de Sacyr en 2011, la compañía se ha adjudicado, entre otros proyectos, la gestión de más de 500 kilómetros de autopistas. En su cartera cuenta con la Pedemontana-Veneta, con una inversión de 2.800 millones de euros; la A-3 Nápoles-Pompeya-Salerno; la A-21 en Turín y la Via del Mare.
Además, desarrolla infraestructuras sanitarias clave, como el Parque de la Salud, la Investigación y la Innovación de Turín, el Hospital de Milán y el Hospital de Novara.
Manuel Manrique ha transformado Sacyr en uno de los principales actores globales en infraestructuras y concesiones, impulsando una estrategia de crecimiento sostenible y reforzando la cooperación entre ambos países. Dentro de su estrategia, Italia se ha consolidado como un mercado prioritario, con inversiones que contribuyen al desarrollo económico y social del país.

