Gross, que supervisa el mayor fondo de bonos del mundo, ha declarado que los inversores de bonos se enfrentan a un destino similar al de una rana que está en una olla con agua y la temperatura se va incrementando gradualmente hasta que el anfibio se cocina. La inflación erosiona el valor de los pagos fijos de los bonos con el tiempo.


"Gran parte de la curva de rentabilidad del Tesoro ahora descansa en terreno negativo en comparación con la inflación que se espera en el futuro y que debe enviar a nuestros inversores en bonos a una situación de canguelo” ha escrito Gross en su comentario de inversión mensual, en la página web de
Pimco. “Los precios ya están llegando al punto de ebullición”.

Los bonos del Tesoro han vuelto al 2,6% este año. Gross redujo todos los valores relacionados con el Gobierno de EEUU, incluyendo los bonos del tesoro, del principal fondo de Pimco, Total Return Fund, a menos de un 4% el 30 de abril.

Bill Gross ha dicho que los gobiernos como el americano están manteniendo de forma intencionada los tipos de interés más bajo de lo que debería para ayudar a reducir sus niveles record de deuda. El fondo tuvo una rentabilidad del 0,56% el mes pasado, por detrás de los resultados del 77% de sus competidores, según datos de Bloomberg.

“La política monetaria en los países desarrollados ha sido la reducción de la temperatura y del nivel absoluto de la rentabilidad en los últimos dos años y medio, después de Lehman Brothers” ha afirmado Gross.

La Reserva Federal ha mantenido su tipo objetivo en un rango mínimo histórico de entre 0% y 0,25% desde diciembre de 2008 para ayudar a estimular el crecimiento, después de la peor recesión desde la Gran Depresión.