Los países de la Unión Europea podrían estar obligados a rescatar a los bancos en problemas de otro socio, según un proyecto de ley de la UE que marca un gran paso hacia una mayor integración financiera del bloque pero que podría incomodar a algunos miembros, particularmente a Alemania. Los problemas de la banca española y el riesgo de que una retirada masiva de fondos bancarios de un país como Grecia pueda propagarse han dado un nuevo ímpetu a la postergada idea de la UE de una ley que aborde el tema de los bancos en quiebra.

El Banco Central Europeo (BCE) se opone al plan del Gobierno -que no se ha hecho oficial- de sanear Bankia a través de la inyección de 19.000 millones de bonos soberanos. Así lo cuenta en su edición digital el diario económico 'Financial Times', que cita "fuentes oficiales europeas".

El plan, según el rotativo británico, ha sido rechazado "rotundamente" como "inaceptable" por el BCE, que ha manifestado al Gobierno de España que "era necesaria una inyección adecuada de capital para Bankia.

La entidad considera que los planes del Ejecutivo corrían el peligro de infringir una normativa de la UE sobre 'financiación monetaria' o emisión de deuda pública de los bancos centrales de los gobiernos".