Entretanto, el subgobernador Donald Kohn dijo que la actual posición de la política de la tasa de interés "parece estar debidamente calibrada por ahora". Janet Yellen, presidenta del Banco de Reserva Federal de San Francisco, calificó de "correcto" el actual nivel de las tasas de interés. Las declaraciones de los funcionarios amplifican una señal enviada por el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, y de sus colegas el mes pasado, quienes dijeron el mes pasado que la etapa más agresiva de los recortes de las tasas de interés en dos décadas estaría concluyendo, finalmente. Las reducciones comenzaron en septiembre y tardarán meses en tener un efecto sobre la economía. Eso no significa que la economía, afectada por el mal estado de los sectores vivienda, créditos y finanzas, se haya librado de la mala racha. La Reserva Federal, sin embargo, espera que una fuerte dosis de reducciones en las tasas de interés, acompañada de un plan de alivio de exoneraciones fiscales del Gobierno puedan impulsar la economía en el segundo semestre del año. El alza de precios de los combustibles, los alimentos y otros productos han despertado preocupación de que podría elevarse la inflación. Nuevas reducciones en las tasas de interés podrían agravar la situación. En efecto, la más reciente reducción de la Fed a fines de abril "estuvo cerca" de provocar más problemas que de solucionarlos, según documentos divulgados recientemente. Muchos economistas creen que la Fed mantendría el nivel de la tasa de interés preferencial en un 2%, su menor nivel en cuatro años, durante su próxima reunión del 24 al 25 de junio, y probablemente por más tiempo, lo que podría abarcar lo que queda del 2008.