En lo que va de años, Japón ha comprado ya 55.300 millones de dólares en bonos del Tesoro estadounidense, lo que se debe sumar a los 
821.000 millones que ya poseía.

China es actualmente el mayor acreedor de EE.UU. con 846.700 millones, ya que redujo su cuota unos 48.100 millones.

La deuda de EE.UU. en manos extranjeras ha aumentado en 374.000 millones de dólares este año, un 10%, según
datos del Tesoro. La demanda de deuda de EE.UU. ayuda a limitar las tasas de los bonos corporativos y las hipotecas, mientras el déficit del país se aumenta a 1,4 billones billones.

Los rendimientos de los bonos del Tesoro promedian 1,31%, frente a 5,21% de mediados de 2007, en el nacimiento de la crisis.