Si bien, todavía no hay un acuerdo final de precio de venta.

Según informa El Confidencial por delcaraciones de fuentes conocedoras del proceso, las conversaciones entre N+1 y los dueños de Corporación IBV comenzaron hace semanas por el interés de la eléctrica y el banco de desprenderse de un negocio que no es estratégico, los cuales ya habían tanteado a otros compradores meses atrás. Un movimiento lógico después de que el holding llevara a cabo una profunda reestructuración en 2008.

Iberdrola habría declinado hacer comentario sobre la operación, mientras que BBVA la ha negado.