El beneficio neto de la entidad acayó hasta los 1.010 millones de dólares - 1.84 dólares por acción- desde los 2.790 millones del mismo período de un año antes. La compañía publicó un beneficio por acción de 1.23 dólares, superando el promedio de los analistas que iba desde los 0.70 a los 2.50 dólares.
El consejero delegado de la entidad, Lloyd C. Blankfein está recortando costes y centrandose en su crecimiento internacional para ayudar a compensar la desaceleración en el comercio, el que aporta la mayor parte de los ingresos de la entidad. El mandatario ha dicho que quiere estar preparado para una recuperación del mercado mediante la eliminación de puestos de trabajo y la adaptación a las nuevas reglas que limitan la capacidad del banco para invertir su propio dinero y hacer operaciones en la cuenta propia de Goldman Sachs.