Sin embargo, la producción de inmuebles, aunque se ha ralentizado, mantiene cierta inercia y sigue poniendo nuevas promociones en el mercado en paralelo a la caída de la demanda, por lo que la absorción del stock no se producirá antes de "tres años o 40 meses".

En cifras, los últimos datos de visados de obra nueva, que suponen una avance de la actividad en los próximos años, cayeron un 58% en 2008, lo que demuestra este parón de la actividad para ajustar los ritmos de producción. Sin embargo, las compraventas de viviendas nuevas sumaron 296.405 en el mismo año, un 13,1% menos.

NO ES FÁCIL ACELERAR EL PROCESO

Según Rodríguez Cepeda, "no será fácil" acelerar la absorción de este stock de viviendas y dar aire al sector, en primer lugar, por razones demográficas. Así, explicó que los ritmos de natalidad se redujeron en los años 80 en relación a décadas anteriores, de modo que, pese a la llegada de inmigrantes y la proliferación de hogares monoparentales, la población de entorno a 30 años, los potenciales compradores, se ha reducido coincidiendo con el exceso de "despensa" en el mercado inmobiliario.

"Dudo que se pueda acortar este plazo", indicó el decano del Colegio de Registradores de España, quien relegó de esta forma a un segundo plano las dificultades del crédito, que también se manejan como clave para reanimar la demanda de viviendas. Al respecto, aseguró que a tenor de las conversaciones mantenidas por los Registradores con el sector bancario, "aquí nadie ha cerrado el grifo (del crédito), sino que el agua que fluye no es la misma que antes", es decir, que se han endurecido las condiciones y las hipotecas ya no son un "manantial inagotable".

AFILAR LAS HERRAMIENTAS PARA CUANDO EL MERCADO SE RECUPERE

En cualquier caso, el decano de los Registradores se mostró convencido de que "pasará la tormenta" y consideró que hasta entonces es tiempo de "afilar las herramientas" con las que cuenta el mercado para cuando repunte el ciclo. Así, subrayó la importancia de los proyectos IRI (Información de los Registros Iberoamericanos) e IGRIAM (Información Gráfica Iberoamericana), que persiguen conectar vía Internet las actividades de los registradores en España y los países iberoamericanos.

El proyecto IRI se refiere al intercambio de información para que los ciudadanos de países asociados --hasta ahora Perú, Ecuador y España-- puedan obtener información online de inmuebles en cada unos de estos territorios, mientras que IGRIAM --que acoge también a Costa Rica-- aporta información gráfica de estos inmuebles.

Por su parte, el superintendente adjunto de los Registradores Públicos de Perú, Álvaro Delgado, presente en el acto, puso énfasis en la gran utilidad de estas herramientas. Según indicó, la inversión inmobiliaria española --centrada en viviendas de clase media y en menor medida en centros comerciales-- se viene manteniendo en Perú, donde desde hace dos años se ha producido una "explosión inmobiliaria".