Francia verá próximamente rebajada su máxima calificación por parte de las agencias de medición de riesgo debido a la crisis de la deuda y las dificultades de la banca gala para hacerle frente. "Un nuevo paquete de rescate para los países endeudados del sur de la Unión Monetaria acabará lastrando las finanzas públicas francesas", auguran Jörg Krämer y Thorsten Polleit, economistas jefes de los institutos Commerzbank y Barclays Capital Deutschland.

A principios de mes y tras el estallido de la bomba Dexia
, las máximas autoridades económicas de Francia salieron al paso de las especulaciones respecto al potencial impacto negativo sobre la nota de solvencia ('AAA') del país galo del respaldo público al banco franco belga Dexia, afectado por su exposición a la deuda soberana griega y las restricciones para acceder a los mercados de capitales.

La semana pasada la agencia de calificación Standard & Poor's revisó la calificación de los cinco bancos más grandes de Francia pero sólo bajó el rating a BNP Paribas de AA hasta AA- y le mantiene la perspectiva estable. S&P confirmó la nota a Crédit Agricole, Caisse Centrale du Crédit Mutuel, Banque Fédérative du Crédit Mutuel y Société Générale y mantuvo también la perspectiva estable.