Duro Felguerano lo tiene nada fácil. Sus problemas en los tribunales por no implementar en tiempo y forma algunos de sus proyectos internacionales han mermado sus arcas y los problemas van creciendo. Por un lado la compañía ha solicitado un forensic a KPMG. Es decir un estudio forense para que ver si se han producido malas prácticas que hayan afectado a la cotización del valor dentro de la propia empresa.
La compañía ha convocado para este miércoles una reunión de su Consejo de administración para tomar decisiones sobre la posibilidad de que algún miembro de su directiva haya filtrado información de carácter interno. Se han producido en su ejecutiva dos despidos, que sin embargo la compañía desliga de este hecho.
Por el otro, Duro Felguera negocia ya de facto con la SEPI la posible entrada del Estado en su capital a cambio de ayudas públicas para reflotar la compañía tal y como aprobó el Consejo de ministros a principios de julio para las empresas más aquejadas por el efecto pernicioso del Covid-19. Recordemos que se trata de un montante total de 10.000 millones el que ha dado luz verde Moncloa en esta partida para que el Estado entre en el capital de estas sociedades a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales, organismo que se encarga de las compañías participadas por capital público.
En su gráfica de cotización observamos como tras la espectacular subida del pasado 8 de julio, sin causas aparentes que lo sustentaran y que rozaron el 29% en una sola sesión, el valor ha perdido un 20% en su cotización. Sigue siendo espectacular el avance del 290% desde los mínimos del ejercicio y le separa un 50% de los máximos del año. En lo que va de 2020 Duro Felguera sigue siendo el séptimo mejor valor del Mercado Continuo español con una revalorización del 42,3%.
Según nuestros indicadores premium, Duro Felguera sigue siendo una opción de compra. En modo consolidación, el valor presenta tendencia a largo plazo alcista, momento total lento y rápido positivo, volumen a medio y largo plazo creciente. Y en el plano negativo destaca la tendencia a medio plazo que es bajista y la volatilidad, a medio y largo plazo, desarrollada por el rango de amplitud, que se mantiene creciente como evidencia claramente el valor.
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