El consejo de vigilancia de Deutsche Post se reúne hoy para discutir las nuevas condiciones de la venta de su filial bancaria a Deutsche Bank.

De momento, Deutsche Post y Deutsche Bank han rehusado pronunciarse al respecto.

Nacionalización de Commerzbank

La semana pasada Commerzbank fue nacionalizado parcialmente tras conseguir una inyección de capital adicional de 10.000 millones de euros (13.600 millones de dólares) de los fondos estatales de ayuda al sector bancario y tras la transacción el Estado alemán tendrá una participación del 25 por ciento más una acción en la entidad.

De este modo, el Estado germano se convierte en un accionista mayoritario, con derecho a veto en decisiones importantes y en la junta general.

De acuerdo con la actual cotización de las acciones de Deutsche Bank, el valor de la participación del 10 por ciento sería de unos 1.400 millones de euros (1.848 millones de dólares).

Entrada de Deutsche Bank en Postbank

Deutsche Bank compró en septiembre del pasado año una participación de casi el 30 por ciento en el Postbank para fortalecer su división de banca minorista en una operación que supuso un nuevo gran paso en la consolidación de la banca privada de Alemania.

La operación por 2.790 millones de euros (3.906 millones de dólares) o 57,25 euros por acción se cerrará el primer trimestre de 2009.

Debido a la crisis financiera internacional, Deutsche Bank tiene ahora serias dificultades para pagar en metálico esta primera parte de la operación ya que también tenía opción a ampliar la participación en Postbank.

La entrada de Deutsche Post en Deutsche Bank es un duro golpe para el presidente de esta entidad financiera, Josef Ackermann, quien hasta ahora se había negado a aceptar la ayuda estatal de los fondos de rescate para el sector financiero.

El pasado otoño Ackermann dijo que Deutsche Bank prefería "superar la crisis por sus propios medios" y que "no necesita capital del Estado".

"Somos uno de los bancos más fuertes del mundo" y "me avergonzaría si aceptamos dinero estatal en la crisis", dijo entonces Ackermann.