La propuesta de la agencia Moody´s pasa porque el Gobierno español sea capaz de fijar un techo de gasto para las administraciones regionales con el objetivo de contener el déficit.

El problema es que, según Moody´s, España no dispone de instrumentos efectivos para que las autonomías cumplan con los objetivos de reducción del déficit, como pasa con Cataluña, que prevé cerrar el año en el 2,66%, en vez del 1,3%, lo que equivale a 2.700 millones más de déficit respecto a lo fijado entre Gobierno y comunidades autónomas.

De hecho, la agencia va más allá y entiende que el Ejecutivo catalán no sólo está ignorando sus responsabilidades como parte del Estado sino que además 'desafía' con los presupuestos aprobados al Gobierno de la nación. Aún así, la posibilidad del Gobierno de prohibirle firmar nueva deuda este año solo conseguiría retrasar los pagos a proveedores y empeorar los problemas de liquidez de la Generalitat.