Ana Botín, durante su intervención en última junta general de accionistas celebrada el 1 de abril.

Ana Botín, durante su intervención en última junta general de accionistas celebrada el 1 de abril.

Invertir en acciones es una de las vías para sacar partido a los ahorros, a través del retorno de la acción y los dividendos. La bolsa ofrece rentabilidad, liquidez y flexibilidad a la hora de invertir. Pero es importante elegir valores sólidos, que ofrezcan resultados sostenibles a medio y largo plazo, con prácticas de negocio responsables, una cultura sólida y una estrategia dirigida a generar valor para la sociedad. Además, las compañías son conscientes de la importancia que tiene cuidar y potenciar las relaciones con los inversores, uno de los principales grupos de interés.

El Banco Santander no sólo es la entidad con mayor número de accionistas -cerca de 4 millones-, sino que cuenta en su capital con un gran batallón de inversores minoristas que crece en protagonismo y que apuestan por el crecimiento recurrente y sostenible del grupo financiero: el 39,63% del capital de la entidad está en manos de los llamados retail. Para ellos, la retribución es fundamental.

Tras la crisis de la Covid-19, el banco retomó el año pasado el pago vía dividendos, restringido desde marzo de 2020 siguiendo las recomendaciones del Banco Central Europeo (BCE). El banco abonará en efectivo con cargo a los resultados de 2021 -teniendo en cuenta el próximo dividendo complementario que se abonará en mayo- 10 céntimos por acción. A esto se suman los dos programas de recompra de acciones por valor de unos 1.700 millones de euros. En total, el capital repartido a los accionistas será de unos 3.400 millones de euros, lo que equivale a una rentabilidad por dividendo del 7%.

“En 2022, tenemos como objetivo un payout del 40% de nuestro beneficio ordinario, que incluirá recompras de acciones que se prevé representen alrededor de la mitad del payout.  Más allá de 2022, aspiramos a aumentar la remuneración al accionista por encima del 40% de nuestro beneficio ordinario, con alrededor de la mitad a través de recompras de acciones y con un dividendo en efectivo por acción creciente”, explicó Ana Botín en la última junta general de accionistas celebrada el pasado 1 de abril. La presidenta del grupo también mostró su confianza en la acción y señaló que “estamos convencidos de que invertir en acciones de Santander a los precios actuales es una de las mejores oportunidades de inversión que tenemos”.

Diálogo y atención personalizada

Pero además de la retribución, el grupo cántabro se esfuerza en mantener un diálogo continuo con los accionistas y una interacción fluida para garantizar que sus opiniones sean consideradas por la dirección y órganos de gobierno. “Necesitamos entender qué es lo que preocupa a nuestros grupos de interés y cuáles son sus necesidades. Escuchando atentamente sus opiniones y evaluando sus percepciones sobre el Grupo, no solo identificamos problemas, también detectamos oportunidades”, destacan en la entidad.

El Santander se relaciona con los pequeños inversores a través del área de Relación con Accionistas e Inversores, que tiene entre sus funciones impulsar el interés y la participación de éstos en los asuntos del banco, además de potenciar una atención personalizada a través de los canales que mejor se ajusten a sus necesidades. En 2021, realizó 15.260 entrevistas para conocer su percepción del Santander como “Sencillo, Personal y Justo”; 18.695 consultas a través de estudios y encuestas de calidad; y gestionó otras 139.301 consultas mediante buzón electrónico, teléfono, whatsapp y reuniones virtuales. Además, llevó a cabo 116 eventos con accionistas minoristas y 942 contactos con inversores institucionales.

Entre las prioridades de esta área está también la mejora de la experiencia de usuario y de los canales de comunicación y atención digitales; la simplificación de la plataforma de delegación y voto, facilitando el ejercicio de los derechos de los accionistas en la junta general; o la organización de foros y eventos virtuales para informar sobre la estrategia y los resultados del grupo.

El Santander cuenta con otras fórmulas para mimar a los pequeños inversores. Entre ellas, un programa de becas para estudiantes con discapacidad que pretende fomentar la inclusión socio laboral y hacer efectivo el principio de igualdad de oportunidades, a través de la Fundación Universia. Tanto los accionistas del banco en España como sus familiares, hasta segundo grado, tienen la posibilidad de acceder a estas ayudas siempre que acrediten estar matriculados en estudios de grado, posgrado o máster impartidos en cualquier universidad del mundo.

También tiene un club con descuentos y promociones exclusivas para los accionistas: yosoyaccionista.santander.com. En este espacio, el banco ofrece información -todos los boletines e informes están disponibles en esta página-; productos financieros ventajosos, como el Plan de Reinversión del Dividendo, la Cuenta Accionista o un seguro de accidentes gratuito; además de numerosas promociones en cultura, viajes, restaurantes y salud, entre otras.